Pérdida de la identidad: causas

Pérdida de la identidad

La pérdida de la identidad se le reconoce como un periodo de confusión como consecuencia de una serie de eventos estresantes o traumáticos. Estas dudas son caracterizadas por el cuestionamiento del sentido de la existencia y son acompañadas por sentimientos de soledad y vacío.

En ocasiones se pueden presentar sentimientos de ansiedad, miedo y tristeza mientras se intenta redefinir quién eres y en qué momento vital de tu vida te encuentras. La crisis de identidad o pérdida de la identidad puede producir consecuencias que afectan no solo el bienestar mental de la persona que lo está experimentando, sino también su contexto y puede representar un riesgo para la salud física y emocional.

En este artículo exploraremos ¿Qué es la pérdida de la identidad? ¿Cuáles son los síntomas? Y ¿Cuáles son sus consecuencias? Quédate un momento.

Pérdida de la identidad
Pérdida de la identidad

¿Qué es la identidad?

Esta se refiere a un conjunto de características, rasgos y creencias que distinguen a una persona o a un grupo, que les permite reconocerse a sí mismo y ser reconocido por los demás. Es el sentido de quién eres, cómo abarca tus valores, tus creencias y los roles que puedes tener en tu vida.

De igual forma, también la identidad se compone de la historia personal, rasgos de personalidad y cómo te percibes a ti mismo. Es importante entender que, la identidad es un proceso dinámico y en constante evolución y no es algo estático.

Las características que se pueden encontrar en la identidad son:

  • Conjunto de rasgos distintivos.
  • Conciencia de sí mismo.
  • Construcción subjetiva.
  • Fenómeno cambiante.

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¿Qué es pérdida de la identidad?

La pérdida de la identidad se refiere a la dificultad para mantener un sentido claro y estable sobre quién es uno mismo, incluyendo sus valores, sus creencias, sus metas y su papel en la sociedad. Se manifiesta como una experiencia en sentirse desorientado o extraño con uno mismo.

Es sentir que una parte de sí mismo se hubiera desvanecido o estuviera oculta. Es importante tener en consideración que no se trata de un diagnóstico clínico, es en sí una experiencia subjetiva que puede ser parte de diversas condiciones o transiciones vitales.

Se caracteriza por:

  • Confusión y cuestionamiento: la pérdida de la identidad implica período de dudas y cuestionamientos sobre quién es uno mismo, como lo ve el mundo y cuál es su lugar en él.
  • Desconexión y vacío: puede generar sentimientos de vacío, despersonalización y desconexión de las propias emociones y capacidades.
  • Dependencia de otros: la persona que experimenta este evento puede volverse muy sensible a la influencia de otros, adoptando valores o metas que no son realmente propias.

Causas de esta pérdida

La pérdida de la identidad o crisis de identidad puede ser causada por múltiples factores, tanto intrínsecos como extrínsecos, que llevan a una persona a cuestionarse su propio sentido y su lugar en el mundo.

Aquí exploraremos algunas de las posibles causas para tratar de entender este fenómeno.

Transiciones vitales significativas

  • Cambios de rol: sea la maternidad/paternidad, jubilación, divorcio, desempleo o pasar de estudiante a profesional. Estos cambios pueden generar una pérdida de la identidad.
  • Migración o cambio cultural: adaptación a un nuevo país o cultura donde las viejas referencias no aplican.
  • Crisis de edad: puede existir la crisis de los 30, los 40 o más años, donde se cuestiona el propósito, las metas cumplidas y las elecciones de vida hasta los momentos.

Eventos traumáticos

  • Abuso: cuál sea el tipo, físico, emocional y sexual, puede llevar a la disociación y la pérdida de la identidad para sobrevivir.
  • Enfermedades crónicas: cambios en la capacidad física o mental pueden alterar la imagen que se tiene de sí mismo.
  • Perdidas: duelo de un ser querido, especialmente si esa persona definía gran parte de su identidad, por ejemplo, la pareja o los padres.

Relaciones disfuncionales

  • Relaciones codependientes: cuando el “yo” se fusiona con el “tú”, existe una pérdida de la identidad, la autonomía y la individualidad.
  • Manipulación: se presenta en parejas, amigos o familiares que erosionan el sentido de valía.

Antecedentes en salud mental

  • Depresión y ansiedad: la depresión puede generar pérdida de la identidad, puede hacer que la persona se siente apática y sin propósito.
  • Trastorno de la personalidad: especialmente en el trastorno límite de la personalidad. Se caracteriza por una pérdida de la identidad y la inestabilidad.
  • Trastornos disociativos: experiencias de desconexión del yo, la memoria o el entorno.

La crisis de identidad o la pérdida de la identidad se puede experimentar según las causas antes descritas, pero también se puede presentar en ciertas edades.

Erik Erikson describió que en la adolescencia es la etapa en donde se debe resolver el conflicto entre la identidad y la confusión de quién se es. Los adolescentes exploran diferentes roles y opciones de vida, como cuestionarse las normas sociales y valores familiares.

La pérdida de la identidad puede tener un impacto significativo en la vida de la persona, puede generar sentimientos de vacío, existencia, inseguridad, confusión y desorientación.

Manifestaciones de la pérdida de la identidad

La pérdida de la identidad, a menudo experimentada durante una crisis, puede manifestarse con síntomas de confusión, desorientación o ansiedad.

Como se ha mencionado, las causas pueden ser diversas y es importante entenderlas también. De igual forma, es fundamental saber reconocer las señales o manifestaciones que se pueden presentar al experimentar una pérdida de la identidad.

Los síntomas son:

  • Vacío, apatía o entumecimiento emocional.
  • Confusión sobre quién eres o qué quieres.
  • Desmotivación, falta de interés en actividades que antes disfrutabas.
  • Ansiedad, depresión y estrés.
  • Sentimientos de no pertenecer o ser un impostor.
  • Dificultad para tomar decisiones.
  • Cambios drásticos en el aspecto físico o en el círculo social sin razón aparente.
  • Dependencia excesiva de la opinión de los demás.
  • Inestabilidad en las relaciones o en el trabajo.
  • Comportamiento autodestructivo.
  • Falta de propósito y dirección en la vida.
  • Baja autoestima y autoconfianza.

Si te sientes identificado/a con estos síntomas, no dudes en buscar ayuda profesional.

Estrategias para redescubrirte

Estas estrategias las puedes aplicar en tu día a día para conectar con tus valores, creencias y sentimientos.

  • Diario emocional: puedes escribir sobre tus pensamientos, emociones, valores y experiencias.
  • Mindfulness y meditación: te ayuda a conectarte con el presente y hacer introspección.
  • Experimentar: probar cosas nuevas, actividades, cursos o grupos para descubrir una nueva faceta.
  • Establecer límites y autonomía: aprender a decir no y proteger tus necesidades.
  • Establecer y fomentar relaciones saludables.
  • Cuidado personal: bien sea actividades físicas como practicar la autocompasión.

Aunque son pequeños pasos, te pueden ayudar a ir construyendo tu identidad o redescubrir quién eres.

Conclusiones

La pérdida de la identidad puede ser una experiencia que se vive más de lo que se cree, está siendo más impactante en la actualidad, ya que las redes sociales y la sociedad fomentan el concepto que a los 20 años debes saber quién eres, que quieres y tener la vida resuelta.

Como se ha mencionado, en la adolescencia se experimenta con mayor dificultad, porque la sociedad o el entorno más cercano también puede ejercer una presión para que descubran quienes son, se colocan expectativas sobre ellos cuando apenas están descubriendo su rol en la sociedad.

Referencias

Aranda, I. (20/10/2023). Therapyside.com

‌Rodríguez, R. (July 7, 2025).  Pérdida de identidad. (n.d.).

Vínculos emocionales: componentes claves

Vínculos emocionales

Los vínculos emocionales son vitales en la vida del ser humano, en sus interacciones y para el desarrollo. Los vínculos emocionales se manifiestan desde la infancia; por tanto, las vivencias o experiencias son fundamentales en esa etapa.

Como bien se sabe, somos seres de interacción; es por ello que establecer vínculos afectivos es imperativo para poder crear autoestima, autonomía e independencia. En este artículo hablaremos un poco sobre lo que son los vínculos emocionales, cuál es su función y qué pasaría si no se desarrollan vínculos afectivos saludables.

Vínculos emocionales
Vínculos emocionales

¿Qué son vínculos emocionales?

También conocido como vínculos afectivos, se hace referencia a una relación entre el amor y el cariño que es establecido entre dos o más personas. Estos vínculos son establecidos entre distintas relaciones, como la familia, los amigos o la pareja.

Los vínculos emocionales están presentes en todo lo que se hace y son influenciados por la interacción. Es importante tener en cuenta que estos vínculos son cruciales en la infancia. Erik Erikson explicaba que estos vínculos son necesarios para el desarrollo saludable de las personas y formación de las relaciones.

El vínculo emocional es más que una interacción o relación superficial; se trata de afecto, confianza, apoyo mutuo y sentido de pertenencia. Existen características esenciales de los vínculos emocionales, las cuales son:

  • Necesidad humana: ya que somos seres sociales y la conexión es tan vital como una necesidad fisiológica, es vital para el bienestar psicológico.
  • Salud mental y física: estos impactan positivamente en la reducción del estrés, la longevidad, la resiliencia y la felicidad en general.
  • Desarrollo personal: los vínculos ayudan al desarrollo, crecimiento personal y el autoconocimiento.

Como se ha mencionado, estos vínculos afectivos pueden estar presentes en cualquier área fundamental de la vida.

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Tipos de vínculos

Existen distintos tipos de vínculos emocionales, cada uno puede cumplir una función. Saber sobre los distintos tipos de vínculos emocionales es importante, ya que te ayuda a saber reconocerlos.

Los distintos tipos son:

  • Vínculo romántico: cuando se establece entre dos personas por una atracción emocional, física, sexual y una conexión emocional.
  • Vínculo de amistad: se trata de un vínculo afectivo en confianza e intimidad entre una o varias personas.
  • Vínculo familiar: se refiere a los lazos afectivos que establecen entre los miembros de una familia.
  • Vínculo fraternal: se da entre hermanos que se genera por la confianza y la conexión emocional.
  • Vínculo de apego: que se forma principalmente entre un niño y sus cuidadores, influye directamente en el desarrollo emocional y social.

En el área laboral también se generan vínculos que ayudan al desarrollo profesional y el desempeño laboral. Cada vínculo tiene características propias y juega un papel importante en el desarrollo emocional y social de las personas.

Desarrollo de los vínculos emocionales

Como bien se sabe, la teoría del apego desarrollada por John Bowlby y Mary Ainsworth en 1970 explica que el vínculo es necesario para el ser humano. Los vínculos en la adultez pueden ser recíprocos, pero entre un niño y su cuidador se basa en la necesidad de seguridad, protección y confianza.

La teoría del apego no es sinónimo de amor y afecto, tampoco es una explicación exhaustiva de la relación humana. En ella se puede observar cómo se forman los primeros vínculos y cómo influyen en las relaciones futuras.

Desarrollaron unos estilos de apego, los cuales son:

Apego seguro: se forma con el cuidado sensible y responsable, se manifiesta en la adultez, con confianza, autonomía, intimidad sana y gestión del conflicto.

Apego inseguro: donde se manifiestan 3 subtipos:

  • Ansioso/preocupado: miedo al abandono, necesidad de validación, celos y dependencia.
  • Evitación/despreocupado: dificultad con la intimidad, supresión emocional y autosuficiencia excesiva.
  • Desorganizado: patrones contradictorios, miedo y deseo de intimidad que están asociados a menudo con experiencias traumáticas tempranas.

Estos estilos de apego tienen un impacto significativo en la adultez, desde el aspecto positivo hasta el negativo. Es posible que se gestione un apego seguro en la infancia siempre que se tengan las estrategias y se base en una crianza respetuosa y segura.

Componentes claves

Como se ha mencionado, los vínculos afectivos se desarrollan en la infancia, entre los niños y los padres o cuidadores, pero en ocasiones ocurre que los vínculos emocionales que se pudieron desarrollar en esa etapa no son saludables.

Existen componentes claves que pueden ayudar a desarrollar y fomentar vínculos emocionales tanto en la adultez o en la adolescencia. Tales componentes son:

  • Confianza: es la base de todo vínculo, se construye con consistencia, honestidad y fiabilidad.
  • Comunicación efectiva: la escucha activa, estar presente, así como comunicar las necesidades y deseos, puede ayudar a fomentar los vínculos.
  • Empatía: es una habilidad que también se desarrolla. Ayuda para entender el vínculo, las necesidades y compartir los sentimientos del otro.
  • Respeto mutuo: valorar las diferencias, los límites, también respetar la autonomía de cada persona y la individualidad del otro.
  • Apoyo y reciprocidad: estar presente en los momentos difíciles y celebrar los éxitos.

La intimidad, y no solo la física, también forma parte de los vínculos emocionales. El saber que puedes ser vulnerable delante de una persona y que obtendrás apoyo y empatía también fortalece los vínculos.

Pero, es importante entender que, así como existen componentes claves para fomentar vínculos saludables, también existen patrones y desafíos disfuncionales.

  • Miedo a la vulnerabilidad: por experiencias pasadas o un estilo de apego evitativo, así como traiciones y miedo a sentirse juzgados.
  • Codependencia: el miedo a la autonomía, la dependencia patológica y la necesidad del otro.
  • Celos: la inseguridad, así como manifestaciones de ansiedad por abandono.
  • Falta de límites: los límites son la mejor estrategia en los vínculos, los fortalece y, cuando no está presente, no se protege el propio espacio y necesidades.
  • Patrones repetitivos: cuando se crean relaciones disfuncionales y en ocasiones no se es consciente de esta situación.

Saber reconocer que puedes experimentar estos desafíos es de gran ayuda para sobre cuáles son los puntos en los que puedes trabajar para fortalecer tus vínculos emocionales.

Estrategias para construir y fortalecer vínculos emocionales saludables

Aquí encontrarás algunos puntos fundamentales que te ayuden a fortalecer los vínculos que ya existen, como construir los que quieres que permanezcan.

  • Autonomía y autorregulación: entender tus patrones relacionales, así como gestionar tus emociones antes de interactuar.
  • Desarrollo de habilidades de comunicación: practicar la escucha activa y la expresión asertiva. Utilizar mensajes como “yo siento” en lugar de “tú siempre”.
  • Fomentar la vulnerabilidad consciente: hablar gradualmente de las emociones con personas de confianza y reconocer que la vulnerabilidad es una fortaleza, no una debilidad.
  • Establecer y respetar límites: comunicar tus límites de manera clara y consciente, así como respetar los límites de los demás.
  • Buscar apoyo profesional: cuando los patrones o sistema de creencias son muy arraigados o destructivos, la terapia individual o de pareja puede ser significativa.

Conclusiones

Sabemos que los vínculos emocionales son fundamentales en el desarrollo personal, pero también en las relaciones interpersonales. Es importante que se puedan fomentar tanto de manera individual como en los contextos en que se desenvuelvan los niños.

Se ha mencionado que los estilos de apego no explican la interacción humana en su totalidad, así como tampoco es sinónimo de vínculo emocional. Es cierto que puede afectar el desarrollo en los niños, generar inseguridad o autoestima baja, pero no es un diagnóstico o una etiqueta. Es importante saber reconocer y responsabilizarse por los patrones disfuncionales en las relaciones.

También es importante expresar que, aunque estés en una relación disfuncional, no implica que sea tu culpa o tu responsabilidad.

Referencias

Selia: (2024, March). vínculos afectivos. Selia.

Mitomanía: persona que miente mucho

Persona que miente mucho

La persona que miente mucho también es conocida como mitómana. Se caracteriza por un comportamiento compulsivo a mentir de forma sistémica y sin necesidad aparente. Esta situación puede afectar a personas de todo el mundo y genera consecuencias muy desagradables.

Una persona que miente mucho se puede manifestar de diversas formas, desde la omisión de información, hasta la creación de historias completamente falsas. Como se ha mencionado, este acto puede tener consecuencias negativas tanto para quien miente como para el entorno.

En este artículo trataremos de comprender por qué la persona miente mucho, cómo identificar si está siendo un trastorno como la mitomanía y las intervenciones adecuadas que pueden ser utilizadas.

Quédate un momento.

Persona que miente mucho
Persona que miente mucho

¿Qué es la mentira?

La mentira es una declaración o acción que no se corresponde con la verdad; la intención es de engañar o de confundir a otros. Una cierta oración se puede interpretar como una mentira.

También se entiende por mentira el acto de la simulación o fingir. Para mentir no se necesita decir una palabra. Su objetivo principal es inducir a otra persona una creencia falsa.  Detrás de una persona que miente mucho puede existir una intencionalidad, de engañar, de ocultar la verdad o de manipular la percepción de la realidad, aunque en ocasiones puede ser un problema de control de impulsos.

Es importante destacar que existen varios tipos de mentiras, que pueden ser clasificadas según su intención y efecto, es necesario saber cuáles son los tipos para lograr identificarlas si están delante de una persona que miente mucho, ya que esto ayudara tanto a quien están engañando como a quien dice la mentira.

  • Mentiras piadosas: son similares a las mentiras blancas, pero con un enfoque más específico en proteger los sentimientos de otra persona.
  • Mentiras intencionadas: estas mentiras se dicen con un propósito en específico, como obtener un beneficio propio, evitar problemas o proteger a alguien de consecuencias negativas.
  • Mentiras patológicas: también conocidas como mitomanía, son mentiras compulsivas, se dicen de forma repetida, incluso cuando no hay razón aparente.
  • Mentiras por omisión: se producen para no revelar una información relevante.

La persona que miente mucho lo puede hacer por diversas razones, no es inherentemente “malo”, es un comportamiento complejo que se puede presentar por múltiples motivaciones. Aunque para algunas personas, según sus bases morales, puede considerar cualquier tipo de mentira algo totalmente malo.

En ocasiones la persona que miente mucho lo puede hacer por protegerse, puede tener una función adaptativa o también para manejar situaciones difíciles.

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Motivos de la mentira crónica

Esta puede deberse a múltiples razones psicológicas y en ocasiones está relacionado con trastornos de personalidad. La persona que miente mucho o que es mitómana puede buscar atención, validar su autoestima, evitar consecuencias negativas o incluso su intención sea manipular a otros.

En algunos casos y según la persona, la mentira se puede convertir en un mecanismo de defensa o un hábito, incluso la persona que miente mucho puede llegar a creer sus propias mentiras.

Aquí algunos de los motivos por los cuales una persona miente mucho

Miedo y evitación

  • Miedo al castigo o las consecuencias: es el motivo más común.
  • Miedo al rechazo o al abandono: temor de no ser aceptado si se reconoce la verdad.
  • Miedo a la confrontación y el conflicto.

Protección de la autoestima

  • Vergüenza o culpa.
  • Necesidad de aprobación o admiración.
  • Mantener una fachada o manejo de imagen.

Búsqueda de beneficios

  • Obtener algo, poder, dinero o atención que no logra conseguir de otra forma.
  • Manipulación para lograr objetivos personales.

Problemas psicológicos subyacentes

  • Baja autoestima.
  • Ansiedad social.

Trastornos de personalidad

  • Trastorno narcisista de la personalidad: miente para aumentar su ego y mantener la grandiosidad.

  • Trastorno antisocial de la personalidad: desvalorizar los derechos de otros, engaño y manipulación sin remordimientos.

Trastorno límite de la personalidad: se presentan mentiras impulsivas, a menudo en el contexto de relaciones inestables o para evitar el abandono.

Aunque la mentira está vista como algo completamente negativo, como se ha mencionado en ocasiones, puede tener una función en la persona. La persona que miente mucho no siempre se da cuenta de su comportamiento, en ocasiones sí puede suceder, pero no sabe cómo detenerse.

Mitomanía

Se trata de una persona que miente mucho, incluso sin ningún tipo de razón aparente. No se habla de mentiras pequeñas o blancas, como cuando una persona se comió algo y no lo acepta. Se trata de mentiras complicadas y quien las dice lo hace para sentirse especial o importante.

La mitomanía también es conocida como pseudología fantástica y consiste en una conducta repetitiva del acto de mentir. Según la Asociación Americana de Psiquiatría (APA), explica que la mitomanía es una tendencia a elaborar, exagerar y decir mentiras, incluidas experiencias imaginadas que implican el autoengaño.

La mitomanía no se considera un trastorno en el manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales (DSM), pero sí se considera una característica de trastornos subyacentes, como los trastornos de la personalidad.

Síntomas de una persona que miente mucho

La persona que miente mucho se caracteriza por la compulsión a mentir de forma persistente y como se ha mencionado sin razón aparente o beneficio inmediato. Los síntomas que se pueden presentar son los siguientes:

  • Mentiras frecuentes y compulsivas: una tendencia a mentir de manera recurrente, incluso sobre temas triviales.
  • Dificultad para controlar el impulso de mentir: experimentan una dificultad significativa para resistir la necesidad de mentir.
  • Mentiras que se agravan con el tiempo: las historias inventadas tienden a volverse más elaboradas.
  • Necesidad de admiración: a menudo son utilizadas para atraer la atención, obtener admiración o evitar situaciones embarazosas.
  • Búsqueda de validación y baja autoestima: esta puede estar vinculada a la baja autoestima y una necesidad constante de validación.
  • Ansiedad: la persona que miente mucho puede presentar ansiedad o estrés, especialmente cuando las mentiras se descubren.
  • Dificultad en las relaciones interpersonales: existe una falta de confianza debido a las mentiras ya que puede afectar negativamente las relaciones personales y profesionales.
  • Dificultad para diferenciar la realidad de la fantasía: en algunos casos, la línea entre la verdad y la fantasía puede difuminarse, lo que dificulta aún más el control de la mentira.
  • Comportamientos de evasión: la persona que miente mucho puede tender a evitar situaciones en las que se puedan exponer sus mentiras.

Es importante destacar que la mitomanía o la persona que miente mucho no es lo mismo que una simple mentira ocasional. Es un patrón de comportamiento persistente que puede requerir de ayuda profesional.

Si sospechas que tú o alguien que conoces puede estar experimentando esta situación, puedes buscar orientación de un profesional de la salud mental.

Estrategias para manejar la situación

Es importante contar con estrategias tanto si eres una persona que miente mucho como para un entorno en el que se está presentando esta situación.

Aquí están algunas estrategias que pueden ayudar a manejar la situación.

Si eres una persona que miente mucho, puedes hacer lo siguiente:

  • Autoconciencia: identificar cuando, por qué y bajo qué circunstancias mientes.
  • Desarrollar habilidades de afrontamiento: aprender a gestionar la ansiedad, el miedo al juicio y la vergüenza sin necesidad de recurrir a la mentira.
  • Practicar la honestidad gradual: empezar con pequeñas verdades en situaciones seguras y sin prejuicios.
  • Buscar apoyo profesional: la terapia es fundamental para abordar las causas subyacentes y desarrollar otras estrategias.

Si vives con una persona que miente mucho, se puede intentar lo siguiente:

  • Establecer límites asertivos: comunicar que la mentira es inaceptable y cuáles pueden ser las consecuencias y que no sean amenazas vacías.
  • Validar tus sentimientos: es normal sentirse herido, enojado o confundido.
  • Reducir la dependencia: no depender de las opiniones o palabras del mentiroso para tomar decisiones.
  • Comunicación efectiva: comunicar cómo te sientes con la mentira y no etiquetar de mentiroso o manipulador.
  • Evitar confrontaciones emocionales.
  • Cuestionar las mentiras: en lugar de acusar, hacer preguntas asertivas que puedan revelar las intenciones en las que no se dan cuenta.
  • No reforzar la mentira: es importante no recompensar el engaño.

Como se ha mencionado, se puede buscar ayuda profesional, bien sea terapia individual, terapia de pareja o familiar, cuando el contexto está siendo mayor.

Conclusiones

Desarrollar la honestidad como un hábito tiene que ser vital, en ocasiones las personas que mienten no nacen haciéndolo. Si bien es cierto que se puede presentar como criterios o características de un trastorno subyacente, en ocasiones se presenta por un aprendizaje vicario.

En ocasiones las personas no se dan cuenta de este comportamiento. Como se ha mencionado, puede ocurrir que las personas se crean las propias mentiras debido a la fantasía que se han podido recrear en su mente.

Es importante que cuando ocurran estas situaciones tengan un sistema de apoyo, ya que esto le ayudará a que el comportamiento repetitivo de mentir pueda disminuir, siempre sin prejuicios o castigos. Tampoco se recompensa el engaño.

Referencias

Colaboradores de Wikipedia (2005, September 23). Mentira Wikipedia.org; Wikimedia Foundation, Inc.

Psicóloga İlayda Cebeciler. (2024, December 19). ¿Qué Es La Mitomanía (Trastorno De La Mentira)? Síntomas, Causas Y Tratamiento. Hiwell; Hiwell Terapia Online y Asesoramiento Psicológico.

Psicología inversa: aplicaciones practicas

Psicología inversa

La psicología inversa, también conocida como técnica reactancia, es utilizada como una estrategia persuasiva. Es muy probable que alguna vez has escuchado cómo alguna persona en una situación concreta habla de psicología inversa. Esta práctica tiene beneficios cuando se sabe aplicar y cuando no es constante o solo bajo el propio beneficio. Es importante tener en cuenta que, no se puede usar en todos los contextos y con todas las personas; en la mayoría de los casos, existe un vínculo entre quien la practica y a quien se le dice.

En este artículo exploraremos sobre lo que es psicología inversa, cuáles son las aplicaciones prácticas y cuáles no. Quédate un momento.

Psicología inversa
Psicología inversa

¿Qué es psicología inversa?

Se refiere a un tipo de táctica psicológica en la cual se pretende inducir a alguien a hacer algo que en realidad no quiere. Se puede decir que es como un tipo de mecanismo que suele utilizarse con niños y adolescentes.

Es conocida también como una técnica que implica una creencia o comportamiento que es opuesto al deseado. Esta situación se presenta con la expectativa de que la psicología inversa anime a la persona a hacer lo que realmente se desea.

La psicología inversa tiene un origen que está basado en el fenómeno de reactancia psicológica, el cual se trata sobre cómo las personas reaccionan de manera negativa al ser persuadidas y por esta razón eligen la opción contraria. Esta situación es debida a que la persona siente que está perdiendo su libertad o autonomía.

Como se ha mencionado, la psicología inversa es una técnica de influencia que busca persuadir a alguien sugiriendo lo contrario de lo que se desea. Alrededor de la psicología inversa existen una serie de mitos sobre ella, los cuales son:

  • Siempre funciona: su efectividad depende de varios factores, como la personalidad, la situación y la relación entre ambas partes.
  • Es una forma de manipulación: si bien es cierto, suele ser usada con fines manipulativos, no siempre es así, puede ser una herramienta para fomentar la reflexión.
  • Es una forma efectiva de tratar problemas psicológicos: la psicología inversa no es una terapia para tratar problemas y tampoco está diseñada para reemplazar la terapia profesional.
  • La psicología inversa no es solo para niños: se puede aplicar a adultos en diversos contextos.

Es una estrategia limitada y que depende del contexto en el cual se usa y la persona a quien va dirigida. No es una herramienta mágica ni una solución para todos los problemas.

Es importante entender que la psicología inversa es contraria a la manipulación, esta tiene un objetivo positivo y a menudo con conocimiento de la otra persona.

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¿Cuándo funciona la psicología inversa?

Esta técnica funciona mejor con personas que tienen una fuerte necesidad de control o son naturalmente propensas a la rebeldía, como los adolescentes o los niños. Aunque se ha mencionado que en adultos, en ocasiones se suele utilizar.

Es importante entender las características de la psicología inversa y cómo funcionan dichas características.

  • Tipos de personalidades
    • Personas con una fuerte necesidad de control, aquellos que expresan odiar, que les digan qué hacer. Personas desafiantes, especialmente adolescentes, o personas donde sienten que su autonomía está siendo reprimida.
    • Personas indecisas y que son empujadas a tomar la decisión.
  • Contextos específicos
    • Niños y adolescentes: funciona en ellos debido a su búsqueda de autonomía e independencia. Situaciones de resistencias: cuando se resisten a hacer algo por pura oposición, no por falta de capacidad.
    • Marketing (con cautela): ejemplos como “stock limitado” pueden generar la sensación de urgencia.

Es importante entender que, debe existir una credibilidad por parte de la persona que está usando la psicología inversa, ya que si no es creíble, esta estrategia puede fallar.

La naturaleza de la petición no funciona en todas las situaciones, es más efectiva en situaciones pequeñas, como ordenar la habitación o una toma de decisión pequeña y no para cambios de toda la vida, como por ejemplo la psicología inversa en el amor.

Aplicaciones prácticas

Como se ha mencionado, esta es una técnica de persuasión donde se busca influir en el comportamiento de alguna persona sugiriendo lo contrario de lo que se desea lograr. En esta estrategia se aprovecha la tendencia humana a la reactancia y el deseo de autonomía.

Su uso puede llegar a diversos contextos, tales como:

Educación y crianza (maternidad/paternidad)

  • No tienes que recoger tus juguetes ahora mismo si no quieres: esperando que, al darle la opción de no hacerlo, lo haga por iniciativa propia.
  • No hace falta que estudies para la evaluación si no te importa la nota.

Resolución de conflictos menores

  • Está bien, si no quieres hablar sobre esto ahora: dando espacio para que la persona sienta que elige hablar.

Manejo de la procrastinación: este punto puede ser autoaplicado.

  • Solo voy a trabajar en esta actividad por 10 minutos, no más: a menudo, una vez que se inicia una actividad, la resistencia disminuye.

Cabe destacar que, la intención detrás del uso de la psicología inversa debe ser positiva y constructiva. Su fin no es la manipulación, realmente es el empuje, por llamarlo de esta manera a que se tome la decisión que ya se tiene prevista.

Riesgos y limitaciones

Todas las estrategias tienen sus desventajas, en este caso no se puede aplicar en todos los contextos o a todas las personas, ya que existen limitaciones, tales como:

  • Personas con baja reactancia: aquellos que son conformistas o no tienen una fuerte necesidad de oponerse y simplemente harán lo que se les dice.
  • Falta de confianza: si la otra persona sospecha que está siendo manipulada, la estrategia puede fallar y dañar la relación que se tiene.
  • Resultados no deseados: existen riesgos de que la persona elija realmente la opción opuesta a la deseada.
  • Daño en la relación: el uso excesivo puede erosionar la confianza y generar resentimientos.

Existen estrategias más saludables que pueden ayudar a la relación y no considerar que pueda ser una manipulación o que no tiene decisión propia y autonomía.

Las alternativas más eficaces o saludables pueden ser:

  • Comunicación asertiva y directa.
  • Negociación y compromiso.
  • Empatía y comprensión.
  • Motivación intrínseca.

Estas alternativas realmente pueden fortalecer la relación y la autonomía.

Conclusiones

Esta estrategia puede ser utilizada en contextos específicos y con ciertas personas, sobre todo en adolescentes y niños. Su uso debe ser mínimo y en ocasiones puntuales. Como se ha establecido, cuando el uso es excesivo, puede dañar la confianza o tener la percepción de que no se tiene autonomía en las decisiones.

Es una estrategia que puede ser utilizada en situaciones pequeñas y para negociar, ordenar la habitación o decidirse por una situación.

Referencias

Colaboradores de Wikipedia, (2018, December 28). como detectar las mentiras. Wikipedia.org; Wikimedia Foundation, Inc.

Desmitificando el síndrome del abandono

Síndrome del abandono

El término síndrome del abandono no es un concepto o diagnóstico que exista en algún manual de salud mental, no es un criterio diagnóstico. Es más bien un contexto social que ha ido teniendo auge por ciertas características o sentimientos que se hacen presentes cuando una persona se siente abandonada.

El objetivo siempre ha sido psicoeducar, informar sobre los términos o cómo puedes ayudarte a identificar ciertos patrones en ti. En este artículo no es diferente el objetivo. En este artículo abordaremos a qué se refiere cuando hablan de síndrome del abandono, las características y los términos reales sobre el bienestar mental. Quédate un momento.

Síndrome del abandono
Síndrome del abandono

Síndrome del abandono

Como se ha mencionado, el síndrome del abandono no es un término clínico real que aparezca, por ejemplo, en el manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales o en la clasificación internacional de las enfermedades. Es más bien un conjunto de sentimientos y comportamientos que pueden surgir de experiencias de un abandono emocional o físico.

Cuando se habla del síndrome del abandono se refieren a experiencias negativas, sobre todo en la infancia, estas experiencias pueden llevar a una persona a desarrollar un miedo intenso al rechazo y abandono en las relaciones interpersonales de adulto.

Se puede manifestar en problemas de apego, codependencia, baja autoestima y dificultad para establecer límites saludables en las relaciones.

Es importante entender que, el síndrome del abandono es un término que ha tenido peso en la actualidad y ha sido introducido como un concepto psicológico cuando no lo es completamente, hace referencia a experiencias en la infancia.

Para entender las experiencias de abandono es importante entender los siguientes conceptos.

  • Problemas de apego: también se conocen como trastornos del apego y hace referencia a las dificultades en la formación y mantenimiento de las relaciones. Puede originarse en la infancia como resultado de experiencias de cuidados inadecuados, negligencia, abuso o maltrato. Existen tipos, los cuales son:
    • Trastorno reactivo del apego (TRA): el cual se caracteriza por el retraimiento, la inhibición emocional y la evitación del contacto.
    • Trastorno de interacción social desinhibida (DSED): está siendo contraria, se caracteriza por la búsqueda excesiva de atención y afecto, incluso de extraños.

Así como se han explicado, los trastornos del apego, para tratar de entender a lo que se refiere el síndrome del abandono, también se debe hablar sobre ansiedad por abandono, la relación con los trastornos de personalidad y el trauma complejo.

  • Ansiedad por abandono: también conocida como ansiedad por separación, es una preocupación o miedo intenso y persistente ante la separación de figuras de apego, padres o cuidadores. Aunque en niños es una fase normal del desarrollo, puede ocasionar problemas significativos y en la adultez experimentar la ansiedad por separación:

Cuando se habla de un síndrome de abandono en relación con los trastornos de personalidad, en el trastorno límite de personalidad uno de sus criterios de evaluación o incluso síntoma es el abandono real o imaginario.

Cuando existe un síndrome del abandono, trauma complejo o mejor dicho, una negligencia en la infancia, abandono o abuso a largo plazo puede generar consecuencias en su personalidad, su interacción social y las relaciones de pareja.

La experiencia de abandono también puede ser subjetiva; como se ha mencionado, puede tener grandes consecuencias y un impacto significativo en la vida.

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La ciencia detrás del síndrome del abandono

Es necesario entender de dónde nace el concepto del síndrome del abandono, o por lo menos las teorías desde la evidencia. Como se ha mencionado al inicio, el objetivo del artículo es la psicoeducación.

Una de las principales teorías para entender los sentimientos que deja el abandono, debemos hablar sobre las siguientes teorías.

  • Teoría del apego

La teoría del apego de John Bowlby y ampliada por Mary Ainsworth explica los vínculos emocionales que los niños forman con sus cuidadores principales. John estableció la importancia del vínculo y el cuidado en la infancia, mientras que Mary, a través de sus investigaciones, postuló la “situación extraña” se identificó tres estilos de apegos principales.

Los vínculos de apego seguro generan desarrollo social, emocional y cognitivo. Si el niño no satisface las necesidades en el cuidado, es donde se presenta lo que llaman socialmente síndrome del abandono.

Por otro lado, Ainsworth explicó la situación extraña para saber cómo reaccionaban los niños ante situaciones de separación y encuentro con extraños, revelando los distintos comportamientos, pero también explica los estilos de apego.

  • Apego seguro: el niño explora con confianza, sabiendo que puede contar con sus cuidadores.
    • Apego inseguro/evitativo: suprime sus emociones y, a menudo, debido a un cuidado distante.
    • Apego inseguro/ambivalente: muestra dependencia excesiva y ansiedad.

Cuando estos estilos de apego están presentes en la infancia, puede afectar significativamente las relaciones interpersonales, la autoestima y el desarrollo social. Aunque los estilos de apego no son un diagnóstico, en ocasiones ayuda a entender los vínculos emocionales.

Si sientes que tus relaciones interpersonales están basadas en la inseguridad y quieres mejorar tu gestión emocional, no dudes en contactar con ayuda profesional. La terapia te proporciona estrategias de gestión emocional. Contáctanos y agenda ya mismo una sesión.

  • Trauma complejo

Este hace referencia a las múltiples experiencias traumáticas que ha podido tener una persona, en las relaciones interpersonales y que ocurren durante períodos del desarrollo y de manera prolongada, pueden ocurrir en la infancia o en la adolescencia.

Estos eventos pueden incluir abuso físico, emocional, sexual o negligencia, lo que genera también el conjunto de sentimientos sobre el abandono. Las consecuencias pueden ser duraderas y profundas, afectando la regulación emocional y la capacidad de establecer relaciones saludables.

Es importante entender que, el abandono o la inestabilidad por parte de los cuidadores en la infancia lleva a que en futuras relaciones tenga miedo al abandono o incluso a desarrollar dependencia emocional o trastorno límite de la personalidad.

Síntomas y manifestaciones

Cuando existe un síndrome del abandono o, mejor dicho, un miedo al abandono real o imaginario, se puede presentar una serie de síntomas.

Esos síntomas pueden afectar varias áreas vitales de vida de la persona, las cuales son:

  • Síntomas emocionales: ansiedad, tristeza, depresión, miedo intenso a la soledad, celos, baja autoestima, culpa y vergüenza.
  • Síntomas conductuales: se pueden presentar en las relaciones, en la búsqueda constante de validación, dificultad para establecer límites, evitación de la intimidad y codependencia. Así como también la autocrítica, impulsividad y conductas autodestructivas.

Es importante entender que los síntomas no solo se presentan en una sola área, tienen un impacto en las relaciones interpersonales, así como en el ámbito académico y laboral.

Intervenciones de ayuda

Es importante entender que, el miedo al abandono no es un diagnóstico, así como tampoco lo es el síndrome del abandono. Hablamos más sobre un patrón de comportamiento sobre las relaciones.

Si bien es cierto que genera síntomas como la ansiedad, la depresión, la irritabilidad y el miedo al abandono tanto real como imaginario, para estos síntomas se pueden generar estrategias o intervenciones que ayuden a disminuirlos.

Las intervenciones de ayuda ante el síndrome del abandono o los síntomas complejos son las siguientes:

  • Terapia cognitivo conductual (TCC): identificación y reestructuración de pensamientos disfuncionales.
  • Terapia de esquemas: trabajo en los esquemas maladaptativos, sobre todo en el abandono e inestabilidad.
  • Terapia dialectico-conductual (DBT): para la desregulación emocional y tolerancia al malestar.

También es importante fomentar actividades del autocuidado, como el mindfulness, establecer límites sanos, desarrollo de una red de apoyo y fomentar la autonomía.

Conclusiones

Aunque se lea repetitivo, es importante entender que el síndrome del abandono no es un diagnóstico, clasificación o trastorno, es más bien una serie de comportamientos y sentimientos que se generan a partir de las primeras interacciones en la infancia o en la adolescencia.

Puede dejar una huella, puede generar un trauma o afectar las relaciones que se mantengan en el futuro, así como la percepción propia. Los sentimientos que generan son complejos y muchas veces se invalidan, ya que consideran que no es una problemática tan grande cuando realmente sí lo es.

Las interacciones sociales generan desarrollo, pero las primeras interacciones generan confianza, autoestima y autonomía.

Referencias

{Cherry, K. (2025). What is attachment theory? Verywell Mind.

La teoría del apego: Aportaciones de Bowlby, Ainsworth & Main. (n.d.). PSISE.

‌Software, A. (2022, November 3). Síndrome de Abandono.

Tipos de aborto según las semanas: impacto psicológico

Tipos de aborto según las semanas

El impacto psicológico que pueden tener los tipos de aborto según las semanas es significativo. Esta decisión directa o indirecta puede cambiar la estructura de una persona y el contexto social en el que ocurra.

Existen distintos tipos de abortos según las semanas, los motivos por los que ocurren de manera voluntaria o involuntaria son personales, así como tomar la decisión cuando es voluntario es totalmente autónomo. Cuando existe un aborto espontáneo, existe a nivel social más empatía, pero cuando es una decisión, en muchos casos se tiende a juzgar por el estigma que existe a su alrededor.

En este artículo exploraremos cuáles son los tipos de aborto según las semanas, el impacto psicológico que genera y estrategias de afrontamiento.

Tipos de aborto según las semanas
Tipos de aborto según las semanas

¿Qué es la interrupción voluntaria del embarazo?

Se entiende por una aplicación de un procedimiento clínico para finalizar el embarazo a solicitud de la mujer o en algunos casos del tutor legal, siempre sea el caso sobre agresión sexual o incesto. La interrupción voluntaria del embarazo es totalmente distinta al aborto espontáneo.

Esta es una decisión compleja y personal, influenciada por múltiples factores: riesgo de salud para el feto, alteraciones en el desarrollo y riesgo de salud para la madre. De igual forma, factores económicos, relaciones disfuncionales, abuso sexual o no sentirse preparada.

La etapa del embarazo puede influir en la experiencia emocional, los métodos disponibles de interrupción del embarazo, lo que a su vez genera el impacto psicológico.

Por otro lado, el aborto es la interrupción y finalización del embarazo de una forma natural o voluntaria.

Si estás pasando por un proceso de embarazo reservado o has tenido una pérdida, puedes acudir a terapia psicológica. En terapia puedes abordar el proceso de duelo, requerirlo y gestión emocional. Contáctanos y agenda hoy mismo una sesión.

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Es importante recalcar que, los servicios públicos de salud aplicarán las medidas necesarias para garantizar el derecho a la prestación sanitaria de la interrupción voluntaria del embarazo. Siempre dependerá de las leyes que se rigen en tu país o región. Esta intervención será bajo supervisión médica.

Tipos de aborto según las semanas y su impacto

Como se ha mencionado, cuando existe un aborto que sea de forma espontánea o inducida, puede generar un impacto psicológico según las semanas que se tengan.

Aborto temprano (hasta aproximadamente 12-14 semanas de gestación): las características comunes que se pueden encontrar en este tipo de pérdida son las siguientes:

  • Menor visibilidad del embarazo: en ocasiones el embarazo no es tan evidente físicamente, lo que puede facilitar la confidencialidad en el entorno, pero en ocasiones esto también lleva a tener una experiencia más solitaria cuando no se comparte.

  • Decisión rápida: generalmente, la decisión de la interrupción se toma en un periodo de tiempo más corto, lo que puede ocasionar tanto en la persona como en el contexto de apoyo, ansiedad por la urgencia o alivio por la pronta resolución.

  • Proceso menos invasivo: los métodos que se suelen usar en esta semana de gestación son menos complejos, por ejemplo, pastillas o aspiración manual, lo que puede influir en la percepción de un trauma físico o estrés.

  • Emociones presentes: el alivio es de las primeras emociones que se pueden llegar a experimentar, así como la ansiedad por la decisión, pero también potencial de culpa, tristeza o una ambivalencia.

  • Menor desarrollo fetal: en los tipos de aborto según las semanas, cuando el desarrollo es menor en esta etapa, la decisión puede ser percibida como menos “pesada” en términos de pérdida; sin embargo, esta siempre es una percepción individual.

Como se ha ido mencionando, los motivos por los que ocurre la interrupción del embarazo son intrínseco, aunque puedan existir factores de salud que influyan en esta toma de decisiones. Es importante recalcar que los tipos de aborto según las semanas pueden generar consecuencias directas con la persona que lo experimenta y su pareja.

Aborto tardío (después de las 12-14 semanas): aquí se toma en consideración el límite legal en Europa o la viabilidad fetal según sean los contextos que se estén viviendo. Aquí están algunas de las características o el impacto que podría generar.

  • Embarazo más “real”: cuando ya han transcurrido más semanas, existe más tiempo para crear un vínculo o el embarazo ya es físicamente visible, lo que puede intensificar los sentimientos de pérdida y procesos de duelo.

  • Decisión más compleja: en ocasiones los abortos tardíos están asociados a diagnósticos médicos como, anomalías fetales, riesgo para la salud materna o circunstancias que se agravaron con el tiempo. Esta situación añade un peso de complejidad emocional.

  • Proceso médico más complejo: los métodos quirúrgicos o de inducción al parto pueden ser estresantes, los pueden percibir como invasivos o físicamente exigentes.

  • Mayor estigma social: en algunos contextos sociales, los abortos tardíos suelen enfrentar un mayor escrutinio o juicio social, lo que puede intensificar en la persona el aislamiento, la vergüenza, la ansiedad o la culpa.

Si estás pasando por un proceso de duelo o tuviste una pérdida hace poco tiempo, no dudes en consultar con ayuda profesional. Tener un espacio para la gestión emocional, así como vivir el proceso de duelo, es vital. Contáctanos y agenda una sesión hoy mismo, aquí te escucharemos.

La recuperación emocional que pueden llevar los tipos de aborto según las semanas, en ocasiones puede llevar mucho más tiempo que la recuperación física. Tus emociones pueden ir desde el enojo, la culpa y la desesperación, e incluso las emociones de tu pareja pueden ser totalmente distintas a las tuyas y eso no implica que algunas de las dos no sean válidas.

Aborto espontáneo vs aborto inducido

Es crucial no solo saber los tipos de aborto según las semanas y el impacto que genera, sino diferenciar estas experiencias y cómo puede afectar psicológicamente en la persona.

Aquí encontrarás pequeñas características para diferenciar y cómo impacta en la vida.

El aborto espontáneo: es una pérdida gestacional; se caracteriza por una naturaleza involuntaria, es decir, la pérdida no es una elección, lo que puede generar sentimientos de impotencia, frustración o culpa y en muchas ocasiones existe la interrogante de “¿Qué hice mal?”. Esta se caracteriza por:

  • Duelo: el impacto que genera la pérdida de un embarazo deseado o esperado es significativa, puede llevar a ansiedad, depresión y un proceso de duelo incluso complicado. En ocasiones algunas mujeres pueden presentar despersonalización.

  • Falta de control: la persona no tiene ningún control sobre el proceso, lo que puede ser emocionalmente desestabilizador y agobiante.

Un aborto espontáneo puede ser una pérdida desgarradora que quizás las personas que estén en el entorno no comprendan. Es posible que no se olviden las esperanzas y los planes que se tenían con el embarazo, pero con paciencia, tiempo e incluso apoyo psicológico podría llegar la aceptación y luego el alivio.

Aborto inducido: también lo conocemos como interrupción voluntaria del embarazo, su naturaleza es compleja y es una decisión, pero a menudo es tomada bajo circunstancias difíciles y sí, puede generar alivio, pero también genera tristeza, culpa y remordimiento. Este se caracteriza por:

  • Estigma: el estigma social, a pesar de en algunos países ser legal, puede amplificar los sentimientos como la vergüenza, el secreto, la ansiedad y el aislamiento.

  • Necesidad de procesamiento: es importante tomar en consideración la necesidad de procesar la decisión, así como sus implicaciones a nivel social.

Según estudios, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ratifica que alrededor del 45% de los abortos inducidos se realizan en condiciones inseguras a nivel mundial.

Factores que modulan el impacto psicológico

Como se ha mencionado, los tipos de aborto según las semanas tienen un impacto psicológico, pero también se debe tomar en consideración que sin importar las semanas que se han transcurrido la interrupción voluntaria del embarazo como el aborto espontáneo tienen factores que modulan como impactara en la vida de la persona y su contexto.

Tales factores son:

  • Apoyo social: es imperativo en estas situaciones tener una red de apoyo, bien sea pareja, familiares, amigos o profesionales en bienestar mental y físico.
  • Bienestar mental preexistente: personas con antecedentes en ansiedad, depresión o trauma pueden tener una respuesta emocional más intensa.
  • Causas de la interrupción: como se ha descrito, las razones subyacentes pueden influir en la experiencia, salud materna, fetal o violencia, entre otros.
  • Autopercepción: aquí es importante tomar en consideración el sistema de creencia personal y cultural en el que socializa, sobre el embarazo y el aborto. Este sistema de creencias puede influir de manera relevante.

Estrategias de afrontamiento

Es importante poder tener estrategias de afrontamiento que te ayuden a sobrellevar este proceso, desde pequeños pasos hasta ayuda profesional.

  • Validación emocional: cada emoción que se siente en este proceso es lícita.
  • Duelo: reconocer la pérdida de un embarazo, sea espontáneo o inducido, es vital; en ocasiones puede requerir de un proceso de duelo.
  • Autocuidado: promover prácticas de bienestar, bien sea físico o emocional. Actividades como ejercicio, alimentación, sueño o hobbies.
  • Búsqueda de apoyo profesional.
  • Practicar mindfulness.

Aunque puedan ser pequeños pasos, son válidos y te ayudarán a transitar por esta situación. Sé amable contigo y sé amable con quien esté transitando está perdida.

Conclusiones

La interrupción voluntaria del embarazo sigue siendo objeto de escrutinio público, incluso aunque el aborto espontáneo sea “más común” no hace que sea un proceso fácil o aceptado. Los tipos de aborto según las semanas generan un impacto psicológico y es importante darle atención, espacio y respeto a ello.

El estigma que existe alrededor de esto debe disminuir, las personas que deciden continuar con el embarazo por las razones que sean como terminar con él por las mismas razones no deben ser juzgadas tan duramente, ambas personas transitan por emociones y tiene un impacto psicológico que muchas veces no se ve a simple vista.

Aunque se lea repetitivo, la amabilidad, la empatía y el respeto son clave en estas situaciones.

Referencias

 Colaboradores de Wikipedia (2020, May 14). Aborto. Wikipedia.

 Organización Mundial de la Salud. (2021, November 25). Aborto. Www.who.int.

Interrumpir el embarazo: emociones en el proceso

Interrumpir el embarazo

Interrumpir el embarazo sigue siendo un tema de controversial, tabú y discusiones. Incluso si se lleva a legalidad o se estudian los motivos por los cuales una persona decide interrumpir el embarazo, la mayoría de su círculo solo le juzgará.

En la mayoría de los casos se juzga desde la ignorancia, la poca empatía e incluso la religión. La toma de decisión para interrumpir un embarazo puede ser abrumadora y los motivos no son entendidos, aunque sea para salvar la vida de una persona.

Es entendible que este tema sea controvertido y que existan dudas como ¿Cuándo puedo interrumpir el embarazo? ¿Cuáles son los motivos? ¿Cuáles son las consecuencias?

Aquí trataremos ese tema con la seriedad, profesionalismo y empatía que merece. Quédate solo un momento.

Interrumpir el embarazo
Interrumpir el embarazo

¿Qué es la interrupción voluntaria del embarazo?

Es un procedimiento para interrumpir el embarazo a solicitud de la mujer. Se considera un derecho y un procedimiento médico que se puede realizar en diferentes etapas del embarazo, dependiendo siempre de la legislación de cada país.

En España se puede interrumpir el embarazo a partir de la semana 14 de gestación, después de este plazo se puede interrumpir el embarazo con ciertas circunstancias, tomando en cuenta el riesgo para la salud de la mujer o anomalías fetales graves.

No se debe confundir el interrumpir el embarazo de manera voluntaria a un aborto espontáneo que ocurre por problemas relacionados con la salud y antes de las 20 semanas.

Es importante entender que interrumpir el embarazo de manera voluntaria es una decisión profundamente personal y autónoma que puede surgir de diversas circunstancias y razones. No es una decisión que se toma a la ligera o por capricho.

Es una experiencia que muchas personas pueden vivir. También es fundamental reconocer que la legalidad de interrumpir el embarazo varía según el país y en algunos casos existen causales específicas que permiten o no su realización.

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Razones para considerar interrumpir el embarazo

Las razones para considerar interrumpir el embarazo voluntario pueden ser diversas y, como se ha dicho, muchas veces puede ser poco comprendida. Es imperativo entender que esta perspectiva se debe comprender y no juzgar.

Es fundamental que las mujeres e incluso familiares tengan acceso a esta información, ya que las redes de apoyo en este caso son tan fundamentales e importantes; pueden hacer que el proceso y la toma de decisión no sean tan abrumadoras.

Aquí algunas razones que pueden considerar antes de interrumpir el embarazo:

  • Inviabilidad fetal: algunos problemas graves en el desarrollo fetal pueden hacer que el embarazo sea inviable, causando sufrimiento tanto al feto como a la madre y debido a eso se toma la decisión.

  • Salud de la madre: un embarazo puede poner en riesgo la vida o la salud de la madre, bien sea por condiciones preexistentes o complicaciones que se presentan en el embarazo. En estos casos, la interrupción voluntaria del embarazo es necesaria para proteger el bienestar físico y mental.

  • Embarazos no deseados por violación o incesto: el embarazo no deseado por una violencia sexual o por incesto puede ser extremadamente traumático para la persona. Interrumpir el embarazo puede ser una opción viable para evitar un daño emocional a largo plazo.

  • Circunstancias personales: no sentirse preparada/o para ejercer la maternidad/paternidad y esta decisión puede ser juzgada duramente. Sus objetivos de vida, situación o edad; son limitantes personales.

  • Problemas socioeconómicos: la falta de recursos económicos, viviendo o apoyo familiar, puede dificultar el cuidado de un niño. Considerar interrumpir el embarazo es una opción que evita situaciones de riesgo.

  • Apoyo emocional: es importante que la mujer tenga acceso al apoyo emocional y psicológico durante este proceso.

  • Problemas de relación: falta de apoyo de la pareja, relación inestable o situación de violencia intrafamiliar.

  • Autonomía: la decisión final sobre interrumpir el embarazo es tomada por la mujer de forma autónoma, sin presiones externas.

Interrumpir el embarazo es una decisión compleja que debe ser tomada por la mujer en función de las circunstancias individuales. Es imperativo tener acceso a información, apoyo y servicios de salud.

Emociones en el proceso

Como se ha mencionado en líneas anteriores, tomar la decisión de interrumpir el embarazo no es algo aleatorio, o los motivos no lo son. Es una decisión que se medita, pero que siempre será autónoma.

En esta decisión se puede presentar una serie de emociones, las cuales son totalmente lícitas. No existe una reacción correcta.

Antes de interrumpir el embarazo, puedes presentar estas emociones.

  • Ansiedad.
  • Miedo.
  • Confusión.
  • Tristeza.
  • Sentimientos de ambivalencia por lo confuso de la situación.
  • Alivio ante la posibilidad de una solución.

Estas emociones son válidas en este proceso y, aunque la decisión está siendo totalmente meditada, no significa que no sientan ansiedad, miedo o ambivalencia. Después de tomar la decisión, también se presentan emociones, tales como:

  1. Alivio: se presenta cuando la decisión de interrumpir el embarazo fue difícil pero necesaria para la persona.
  2. Tristeza y duelo: es normal experimentar una sensación de pérdida, aunque la decisión haya sido consciente, puede existir un duelo por lo que pudo haber sido.
  3. Culpa o remordimiento: especialmente si existen conflictos con valores personales, aunque es menos frecuente en contextos sociales donde existen menos estigmas.
  4. Ansiedad o estrés: el procedimiento puede llevar a síntomas ansiosos, por la recuperación o por el secreto si llegase a existir.

Es importante entender que, si la persona tiene un antecedente en bienestar mental como la depresión o ansiedad, estas condiciones pueden verse afectadas y tener un impacto significativo en la vida.

Cada persona experimenta el proceso de manera única, no existen dos experiencias iguales. Las emociones que se presentan también van en conjunto con el proceso de la toma de decisión.

Lleva un proceso de reflexión donde en ocasiones buscan ayuda de amigos, familiares o pareja para poder tomar la decisión y transitar por ella. Interrumpir el embarazo no es una decisión aleatoria, tiene sus motivos, tiene autonomía y es una decisión libre de presiones externas.

Apoyo psicológico

El acompañamiento psicológico es vital en la decisión de interrumpir el embarazo, puede ser útil para procesar las emociones, validar sentimientos y desarrollar estrategias de afrontamiento.

Los tipos de apoyo que te puede brindar la terapia psicológica son:

  • Asesoramiento pre interrupción voluntaria del embarazo: para ayudar a tomar decisiones informadas, explorar y transitar las emociones.
  • Acompañamiento post interrupción voluntaria del embarazo: para procesar las emociones, el proceso de duelo o cualquier situación difícil que surja.
  • Terapia individual o de pareja: en ocasiones la situación puede afectar las relaciones o el bienestar general.
  • Estrategias de autocuidado: como el mindfulness, ejercicio, apoyo social y actividades de gusto.

Es importante que la educación sexual no se deje solo de la mano académica, la educación sexual proviene también de casa y la sexualidad debe dejar de ser un tabú cuando se esté preparado.

Conclusiones

Interrumpir el embarazo, aunque pueda ser legal en muchas regiones, se sigue juzgando, como se ha mencionado reiteradas veces, no es una decisión que se toma a la ligera o por caprichos. Existen múltiples motivos y todos válidos por los que una mujer decide interrumpir el embarazo. En este ámbito se debe ser amable, empático y respetuoso. Aunque tú nunca hayas pensado en interrumpir tu embarazo, aunque consideres que jamás tomarías esa decisión, no implica que otras personas no deban hacerlo.

Referencia

Junta de Andalucía. (n.d.). Información general de la Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) –

WHO (2023) Aborto. (n.d.).

Moullier, R., & Mesle, B. (2007). Interrupción voluntaria del embarazo. EMC – Ginecología-Obstetricia43(1), 1–20.

Bullying físico: consecuencias

Bullying físico

El bullying físico o también llamado acoso, cuando es repetitivo e intencionado, genera consecuencias abrumadoras para la víctima. Este tipo de abuso lo puede experimentar cualquier niño o adolescente.

En los últimos años, el bullying físico ha tenido un incremento significativo y alarmante. En ciertos contextos sociales se suele hacer caso omiso, lo observan como “un juego” de adolescentes o niños, cuando la realidad es otra.

Es importante saber reconocer las características, cómo se puede detectar, prevenir y cómo actuar ante el bullying físico. En este artículo trataremos de desglosar los aspectos más importantes para poder reconocer este tipo de abuso. quédate un momento.

Bullying físico
Bullying físico

¿Qué es el bullying físico?

Se entiende por un tipo de abuso, intimidación o acoso que se puede presentar de manera repetitiva, existiendo también un contacto físico entre la víctima y el agresor.

El agresor suele ser una persona de autoridad, más fuerte o grande que la víctima; en este caso, la víctima siempre será más pequeña o vulnerable. El bullying físico es uno de los más comunes y se puede encontrar en las escuelas, así como en el ámbito laboral.

El bullying físico es más propenso a presentarse entre los niños y varones dado sus conductas agresivas.  No estamos hablando de un conflicto ocasional o una pelea justa, hablamos de un patrón de comportamiento repetitivo y desequilibrado en el poder.

El acoso físico puede presentarse de la siguiente manera:

  • Golpes y patadas: agresiones físicas que pueden causar dolor, moretones o lesiones.
  • Empujones: como zancadillas y acciones que busquen desestabilizar y causarle una caída a la víctima.
  • Daño o robo de pertenencias: quitar o romper objetos de la víctima como, libros, dispositivos electrónicos, en ocasiones la comida.

Siendo el comportamiento tan repetitivo, en ocasiones utilizan las amenazas para desestabilizar emocionalmente, la víctima puede entrar en alerta debido a las agresiones físicas anteriores.

Existe una clara diferencia entre los tipos de bullying que es necesario también saber identificar.

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Características del bullying físico

Este tipo de abuso tiene varias características distintivas que lo diferencian de otros tipos de acoso. Es importante reconocer estas características distintivas, así como los síntomas.

Las características del bullying físico son:

  • Repetición: no se trata de un incidente aislado, sino de una serie de actos violentos que ocurren una y otra vez; cuando se vuelve algo repetitivo, lo convierte en una agresión. Esta agresión puede tener consecuencias a largo plazo.
  • Intencionalidad: este maltrato no es accidental, existe una clara intención de causar daño a la persona. El agresor actúa con el propósito deliberado de herir, bien sea para ejercer control, intimidar o porque sencillamente consigue placer en el sufrimiento ajeno.
  • Desequilibrio de poder: existe un desequilibrio entre el agresor y la víctima. Este desequilibrio puede ser físico, es decir, el agresor es más fuerte, grande o con un status social distinto, obteniendo más apoyo de sus coetáneos. Los agresores se aprovechan de esta ventaja

Es importante recalcar que, el bullying físico tiene un impacto negativo en la vida de la persona, ocasiona daño emocional, psicológico y obviamente físico. En la mayoría de los casos las agresiones son a la persona, pero también el daño a las pertenencias para poder herir de una manera indirecta.

Si estás siendo víctima de abuso, no dudes en buscar ayuda, puedes tener un espacio de expresión. La terapia te proporciona un espacio seguro y confidencial. Da el primer paso y contáctanos.

Para poder reconocer el bullying físico es importante conocer las señales de advertencia, que también van de la mano con las características.

Las víctimas suelen mostrar síntomas físicos y emocionales, en ocasiones es difícil reconocer estas señales, ya que muchas veces las víctimas temen mostrar o pedir ayuda por miedo a las represalias.

  • Lesiones inexplicables: golpes, cortes o moretones que el niño o adolescente no puede explicar.
  • Perdida o daño de pertenencias: ropa cortada o desgarrada, libros, juguetes o dispositivos electrónicos dañados.
  • Retraimiento social: el agresor, en la mayoría de los casos, aísla a la víctima, se muestra más callado y evita situaciones sociales, así como también asistir al colegio.
  • Problemas físicos recurrentes: dolores de cabeza o gastrointestinales sin razón aparente.
  • Conductas regresivas: enuresis o encopresis.
  • Cambios en el apetito y alteración en el sueño.
  • Ansiedad o depresión.

Es importante reconocer las señales de advertencia para poder brindar ayuda y estrategias. Sé comprensible en estos casos, no invites tampoco a la agresión.

Causas del bullying físico

Las causas de este abuso pueden ser complejas y diversas. Así como reconocer las señales en la víctima, también es importante reconocer los factores que detonan a la persona a ser agresiva.

Aquí están algunas de las causas más comunes:

  • Problemas familiares: los niños que crecen en hogares donde prevalece la violencia, el desinterés parental y la falta de comunicación pueden desarrollar comportamientos agresivos.
  • Baja autoestima: los agresores a menudo buscan dominar a otros para sentirse superiores y compensar sus inseguridades.
  • Falta de habilidades sociales y emocionales: quienes no han desarrollado la habilidad de empatizar o gestionar sus emociones pueden recurrir a la violación para expresar la frustración.
  • Contexto social: en algunos espacios la violencia es normalizada e incluso forma parte de la resolución de conflictos.
  • Trastornos de conducta: trastornos de oposicionista desafiante, trastornos en déficit de atención e hiperactividad.

Cuando existe una intervención en las causas, las probabilidades de desarrollar este comportamiento disminuyen.

Roles en el bullying

Se debe entender que no existen solo dos roles en el bullying, aquí encontrarás los roles detallados en el bullying físico.

  1. El agresor (bully): es la persona que ejerce la agresión física. Sus acciones pueden ser por búsqueda de poder, satisfacción, entre otros.
  2. La víctima: quien es agredida, se evidencia señales como moretones inexplicables, dolores de cabeza o ausentismo escolar.
  3. Los espectadores: quienes presencian el bullying físico. Estos pueden estar divididos en tres.
  4. Espectador pasivo: son quienes presencian el acoso, pero no hacen nada para detenerlo ni apoyar a la víctima. No hacen nada por miedo o indiferencia.
  5. Espectador activo: anima al agresor, no inician el acoso, pero participan de alguna manera, riéndose o ayudando a mantener a la víctima inmovilizada.
  6. Defensores: son quienes intentan ayudar a la víctima, detener la agresión o buscar ayuda.

La inacción de los espectadores puede provocar que el abuso permanezca por más tiempo y en ocasiones evolucione.

Es importante crear un entorno con concientización sobre el bullying físico para ayudar a las víctimas y evitar la agresión.

Bullying físico: consecuencias

Como se menciona al inicio, las consecuencias del bullying físico pueden ser devastadoras, tanto a corto plazo como a largo plazo.

Estas consecuencias pueden ser físicas, psicólogas, emocionales y sociales. El bullying también impacta al agresor.

Para la víctima

  • Físicas: lesiones, dolor crónico y, en ocasiones, lesiones que pueden terminar en hospitalizaciones.
  • Psicológicas: baja autoestima, indefensión aprendida, depresión, ansiedad, miedo, estrés postraumático, desconfianza en los vínculos, bajo rendimiento escolar y en ocasiones comportamientos erráticos y agresivos.
  • Académicas: bajo rendimiento escolar, ausentismo y evitación constante a los compañeros.
  • Sociales: dificultad para confiar en los demás y poder crear nuevos vínculos sociales.

Para el agresor:

problemas de conducta a largo plazo, riesgo de delincuencia, hurto, dificultades en las relaciones futuras y en ocasiones privativa de libertad.

Para los espectadores:

culpabilidad, miedo y normalizar la violencia como mecanismo de afrontamiento y defensa.

Para el entorno:

desconfianza constante y estructuras morales inestables. Se genera un entorno hostil.

¿Qué hacer frente al bullying?

Aprender estrategias de prevención e incluso para actuar al momento del bullying es necesario y totalmente imperativo.

Este es el segmento más crucial para poner en práctica

Si eres víctima:

  • No culparte: el bullying nunca es culpa de la víctima.
  • Hablar con un adulto de confianza: es importante tener espacios de expresión y seguridad como: los padres, maestros, consejeros o autoridades.
  • Evitar al agresor: si es seguro hacerlo
  • No responder con violencia: esto puede hacer que la situación escale.

Si eres espectador

  • No seas indiferente: el mensaje de la inacción es el apoyo y que su comportamiento es aceptable.

Intervención de forma segura: buscar ayuda a un adulto, distraer la situación y apoyar a la víctima.

Para los supervisores/cuidadores/padres/docentes

  • Estar atento a las señales
  • Escuchar sin juzgar.
  • No minimizar la situación solo por “juegos”.
  • Actuar de inmediato.
  • Establecer consecuencias claras y justas.
  • Fomentar un espacio seguro y confiable.
  • Enseñar habilidades de resolución de conflictos y empatía.

Es importante también tener estrategias de prevención y poder crear entornos seguros para evitar este tipo de comportamiento. Aquí algunos puntos importantes para poder aplicar.

  • Cultura de respeto: fomentar valores de empatía, inclusión y respeto por los demás.
  • Sensibilización: talleres para padres y docentes para darle mayor importancia a esta situación.
  • Orientación profesional: es importante desarrollar habilidades de la mano de profesionales.

También es importante entender que, si tú no has pasado por una agresión en tu vida, no implica que no exista o que se minimice.

Conclusiones

El bullying físico tiene consecuencias abrumadoras y no solo en la víctima, a largo plazo también afecta al agresor y a la sociedad.

Se ha dicho mucho en estos últimos años que la sociedad es de cristal, que ahora no se puede jugar con los niños o adolescentes porque todo es violencia, pero no podemos voltear la cara o mirar a la otra calle cuando se está cometiendo una agresión.

No se debe normalizar una agresión física, daño o hurto de pertenencias solo porque se considere “un juego”. Para quien vive el día a día del bullying no es un juego, es una clara agresión.

Seamos más empáticos y respetuosos.

Referencias

MARSHALL-SESLAR, A. (2022, December 14). McMillen Health. McMillen Health.

Ruano, B. (2023, agosto 08) Bullying físico: causas, consecuencias y formas de intervención. (n.d.).

Deseo sexual hipoactivo: señales

Deseo sexual hipoactivo

El deseo sexual hipoactivo es un trastorno que se caracteriza por un deseo sexual bajo; es un problema común en el ámbito sexual. Aunque no se habla mucho de ello, puede estar presente por múltiples causas.

El deseo sexual hipoactivo puede afectar tanto al hombre como a la mujer. Puede generar consecuencias en las relaciones e incluso en el bienestar emocional de la persona que lo padece, pero ¿Qué es el deseo sexual hipoactivo? ¿Cuáles son los síntomas?

En este artículo trataremos de responder esas dudas y, más referente a este problema, quédate un momento.

Deseo sexual hipoactivo
Deseo sexual hipoactivo

¿Qué es el deseo sexual hipoactivo?

Se caracteriza por una ausencia persistente o una disminución significativa del interés o del deseo por la actividad sexual. Esta situación causa malestar o dificultades en las relaciones interpersonales.

La persona que experimenta el deseo sexual hipoactivo no está presente o está muy bajo los pensamientos y fantasías sexuales y se preocupa por esa ausencia.

La falta de deseo sexual puede ser relativamente común. Se estima que una de cada cinco personas pierde el interés por el sexo en algún momento de su vida.

Para que el deseo sexual hipoactivo se considere un trastorno, debe causar una angustia o dificultad en las relaciones interpersonales; la situación se debe prolongar por al menos seis meses.

El manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales (DSM) dividió este trastorno en dos categorías: el trastorno del deseo sexual hipoactivo masculino y trastorno de interés/excitación sexual femenino.

Que esté presente esta apatía sexual no implica que no exista el amor en la pareja o la falta de atracción, el deseo sexual va mucho más allá de la voluntad. El impacto que puede tener en la vida de quien lo padece es significativa, así como también en el entorno.

Como se ha mencionado, no está relacionado con la atracción o el amor, pero esto no implica que emocionalmente no afecte a la otra persona, puede afectar la relación de pareja ocasionando a veces rupturas y afectar la autoestima.

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Señales de advertencia

Quien experimenta pérdida de libido presenta ciertos síntomas; son como señales de advertencia que algo no va bien en cuanto a las relaciones sexuales.

Recuerda que, la disminución del apetito sexual en las relaciones puede llegar a ser común y no tratarse de una problemática. De igual forma, aquí encontrarás algunos síntomas que se presentan cuando está presente un deseo sexual hipoactivo (DSH).

  • Disminución del deseo sexual: falta de interés en la actividad sexual, incluyendo la masturbación o disminución de la frecuencia con la que se experimentaba.
  • Ausencia de fantasías sexuales: una persona que experimenta DSH puede que presente nulo o muy pocas fantasías o pensamientos sexuales.
  • Preocupación: puede sentirse ansiosa, triste o frustrada por la falta de deseo sexual y puede experimentar problemas en la relación, así como autoestima baja debido a ello.
  • Dificultad para iniciar o mantener la actividad sexual: tener iniciativa puede ser más difícil e incluso mantener las relaciones con una pareja.

Como se ha mencionado anteriormente, para que exista el diagnóstico es importante tener en cuenta que genera sentimientos/emociones como ansiedad, preocupación e irritabilidad en la intimación y se debe experimentar por al menos 6 meses continuos.

Puedes experimentar un deseo sexual bajo, pero también puede estar asociado a otras situaciones. Si te sientes identificado/a con estos síntomas y sientes que está siendo una problemática para tus emociones, no dudes en buscar ayuda psicológica. La terapia te ayudará a identificar la problemática y te ayuda con estrategias para aumentar la confianza y autoestima. Contáctanos y agenda hoy mismo una sesión.

Causas del deseo sexual hipoactivo

En la falta de deseo sexual pueden influir diversas causas; estas pueden ser orgánicas o psicológicas. Se entiende que sus causas pueden ser multifactoriales.

Así como reconocer los síntomas para saber si experimento un deseo sexual hipoactivo es necesario también reconocer las causas para poder intervenir.

Aquí están algunas de las posibles causas:

Factores psicológicos

  • Estrés y ansiedad: existen estudios que explican la relación directa o cómo impacta el estrés en la vida cotidiana de las personas, estrés laboral, financiero o personal.
  • Depresión y otras patologías: la depresión es una de las primeras causas comunes de bajo libido.
  • Baja autoestima: cuando existe una imagen corporal negativa, como dismorfia corporal o insatisfacción de ella misma.
  • Traumas: abuso sexual o experiencias negativas previas.
  • Problemas en las relaciones: conflictos no resueltos, falta de comunicación, resentimiento, infidelidades o desapego en el vínculo amoroso.
  • Mitos y creencias irracionales sobre el sexo: educación sexual restrictiva o vergüenza asociada al placer debido a las creencias que se han impuesto en la crianza.

Factores médicos/fisiológicos

  • Desequilibrios hormonales: baja testosterona (en hombres y mujeres), hipotiroidismos o hipertiroidismo.
  • Condiciones médicas crónicas: diabetes, enfermedades cardiacas, cáncer o hipertensión.
  • Medicamentos: antidepresivos, anticonceptivos orales o medicamentos para la presión arterial.
  • Cambios relacionados con la edad: como la menopausia o andropausia.
  • Condiciones ginecológicas o urológicas: endometriosis, disfunción eréctil o dolor durante las relaciones sexuales conocido como dispareunia.
  • Enfermedades de transmisión sexual.

Factores del estilo de vida

  • Abuso de sustancias ilícitas: alcohol, drogas y tabaquismo.
  • Higiene del sueño alterada.
  • Alimentación: relación dañina con la alimentación.
  • Falta de ejercicio o actividades físicas.

Como se ha mencionado, si la falta de deseo sexual no causa angustia personal ni problemas en las relaciones, no se considera un trastorno. Es una pérdida de apetito sexual que, si bien es cierto, se puede volver a largo plazo un problema.

Intervención y abordaje

Si existe una persistencia en los síntomas, si está afectando tanto la vida diaria como la relación de pareja y no es una situación puntual, es cuando debes buscar ayuda de profesionales, de igual forma cuando genera una angustia significativa.

Como se ha mencionado, el impacto en la vida diaria es significativo, afecta la calidad de vida, la felicidad y la conexión con la pareja.

Ofrecer y saber que existe un panorama de las soluciones que puede ayudar a la relación y a la persona que esta experimenta el deseo sexual hipoactivo es alentador.

Aquí están algunos puntos de estrategias o intervenciones adecuadas a esta situación.

  • Terapia de pareja: es importante para mejorar la comunicación, resolución de conflictos y explorar las dinámicas sexuales. La terapia integral de pareja es de gran ayuda y obtiene resultados positivos.

  • Terapia individual: para poder abordar las causas individuales tales como, traumas, ansiedad. Depresión o problemas de autoestima. La terapia cognitivo-conductual o terapias contextuales son de gran ayuda.

  • Intervenciones médicas: revisión de medicamentos que contribuyan al problema (siempre bajo supervisión médica)

  • Terapias hormonales: si se identifica un desequilibrio (siempre bajo supervisión médica)

  • Cambios en el estilo de vida
    • Manejo del estrés: meditación mindfulness y técnicas de relajación.Mejorar la calidad del sueño.Alimentación equilibrada y ejercicios.
    • Reducir el consumo de alcohol.

  • Mejorar la conexión en la pareja
    • Comunicación abierta y honesta.Explorar nuevas formas de la intimidad.Tiempo de calidad juntos.
    • Rutinas de afecto.

Es importante entender que, una vez que se vayan aplicando las estrategias, no implica que todo cambie automáticamente, requiere de paciencia y compromiso.

Conclusiones

El deseo sexual hipoactivo puede ser una problemática que afecte las relaciones de parejas, puede afectar la autoestima y el estado de ánimo.

Es fundamental entender que, aunque es una problemática real, las personas son hablan de esta situación, ya que sienten vergüenza. La sexualidad siempre ha sido algo importante en las relaciones y en la sociedad sigue siendo un tabú.

Puedes experimentar un deseo sexual bajo, pero esto no implica que sea un trastorno. Se pueden experimentar también otras áreas de la relación de pareja para poder saber qué sucede y cómo intervenir.

Referencias

Planned parenhthood (2025) Trastorno del deseo sexual hipoactivo (TDSH). (n.d.).

Síntomas de depresión grave: estrategias

Síntomas de depresión grave

Los síntomas de depresión grave o también conocida como depresión mayor pueden llegar a ser limitantes. Según la Organización Mundial de la Salud (2023) en sus datos estadísticos explica que el 5% de los adultos a nivel mundial padecen de depresión.

Los síntomas de depresión grave pueden causar grandes consecuencias en quienes padecen depresión. Es importante entender que no son episodios o una tristeza y listo. Se entiende que existen dudas como: ¿Qué es la depresión mayor? ¿Cuáles son los síntomas? ¿Existen estrategias que me ayuden?

En este artículo trataremos de darte respuestas que te puedan ayudar, quédate un momento.

Síntomas de depresión grave
Síntomas de depresión grave

¿Qué es la depresión mayor?

La depresión grave, también conocida como depresión mayor, es un trastorno caracterizado por una tristeza persistente, pérdida de interés o placer en actividades que antes se disfrutaban.

Este estado de ánimo puede interferir significativamente en la vida cotidiana de la persona, afectando hábitos alimenticios, de sueño y la energía. El trastorno depresivo mayor se encuentra catalogado dentro de los trastornos psicoafectivos.

La depresión es uno de los trastornos más frecuentes en el ser humano y también es crónica. Puede ser considerada incluso como la primera causa mundial de discapacidad. La depresión no es solo una simple tristeza.

La depresión grave no es algo que se pueda “superar” y listo, tampoco se trata de “no echarle ganas a la vida”, las personas que padecen depresión no buscan estar en ese estado. La depresión puede llevar al suicidio debido a su intenso malestar.

La depresión afecta tanto a hombres como mujeres, de cualquier edad.

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Síntomas de depresión grave

Los síntomas de depresión grave se deben reconocer para poder buscar ayuda. Reconocer estos síntomas te ayuda a saber que está pasando, como se ha mencionado no es una simple tristeza

En líneas anteriores se menciona que los síntomas de depresión grave pueden ser limitantes, pueden afectar tu vida de manera grave.

Los síntomas de depresión grave se pueden manifestar de diferentes formas, las cuales son:

Síntomas emocionales

  • Estado de ánimo deprimido: sentimientos constantes de tristeza, vacío o desesperanza, la mayor parte del día o casi todos los días.
  • Anhedonia: caracterizado por una pérdida de interés o placer en casi todas las actividades que antes te gustaban, incluidos hobbies, sexualidad e interacciones sociales.
  • Irritabilidad o frustración.
  • Sentimientos de inutilidad o culpa excesiva.

Síntomas cognitivos

  • Dificultad para concentrarse: problemas para recordar, prestar atención a instrucciones o tomar decisiones.
  • Pensamientos recurrentes sobre muerte o ideación suicida.
  • Pesimismo o visión negativa sobre el futuro.

Síntomas físicos

  • Cambios en el apetito: pérdida de peso o cambio de peso debido al aumento o disminución significativa del apetito.
  • Trastornos del sueño: insomnio o hipersomnia.
  • Fatiga: cansancio constante incluido despues de descansar, se fatiga constantemente en las actividades que hace.
  • Agitación psicomotora: inquietud o lentitud en movimientos y habla; este síntoma es percibido por otros.
  • Disminución de la actividad en general.

En los síntomas de depresión grave también se pueden presentar síntomas de baja autoestima, infravalorarse.

En los síntomas de depresión grave, el más significativo es la profunda tristeza o sensación de desesperación que pueden llegar a sentir en el día a día. Los síntomas de depresión grave pueden durar meses o incluso años.

Es importante destacar que para el diagnóstico, los síntomas de depresión grave deben cumplir una triple contingencia, es decir, intensidad, frecuencia y duración de los síntomas.

Los síntomas de depresión grave deben estar presentes al menos mínimo un mes, en ocasiones un periodo mayor a 6 meses, que los síntomas estén presentes casi todos los días o la mayor parte del día y la intensidad (según la percepción de cada uno) sea elevada.

Los síntomas de depresión grave pueden tener un impacto significativo en la vida de quien la padece, no solo hablamos de la tristeza, la falta de concentración o la desmotivación.

Genera un impacto significativo en la vida de la persona en áreas como:

  • Disminución del desempeño laboral, en ocasiones ausentismo laboral.
  • Bajo desempeño académico.
  • Aislamiento social.
  • Ruptura de relaciones en ocasiones.

Estos son solo algunos puntos de los que pueden llegar a impactar la depresión mayor en la vida de las personas.

Se debe recordar que, si bien es cierto que los síntomas de depresión grave solo los manifiesta, la persona que padece la depresión también afecta a su entorno, en preocupación o impactando en las relaciones interpersonales, por la irritabilidad o la ansiedad que puede llegar a sentir. Recuerda ser amable.

Desmitificando la depresión

Es importante entender que, en torno a la depresión, sigue existiendo un sistema de creencias erróneas sobre lo que es la depresión.

La depresión es una enfermedad real; sus causas son bases biológicas, psicológicas y sociales. Desde una alteración química que afecta el estado de ánimo, donde ciertas estructuras cerebrales se pueden ver comprometidas.

En bases psicológicas; por antecedentes, por ejemplo, tener familiares que hayan padecido depresión o incluso antecedentes propios, trastornos de ansiedad, trastorno bipolar, trastornos de personalidad.

En sus bases sociales; existen la relación que pueda tener una persona con su contexto. Si este contexto es disfuncional, las probabilidades de padecer una depresión son más altas. Se debe entender que, una patología no existe por sí sola, en muchas ocasiones está relacionada a su contexto social.

Existen creencias erróneas a su alrededor como:

  • Lo que sientes es solo pereza
  • Se puede salir con fuerza de voluntad.
  • Solo le pasa a la gente débil.
  • Es algo que te inventas para llamar la atención.

Nadie se quiere sentir mal, por lo menos no de manera deliberada. Es un problema real, tiene relación directa con el ámbito social.

Síntomas de depresión grave: estrategias

Una vez que se realiza un diagnóstico de depresión mayor adecuado, se evalué la gravedad de la misma, debe tener en cuenta también si existen otros trastornos presentes, como la ansiedad, por ejemplo.

Se deben evaluar los objetivos a trabajar y de una vez las técnicas que se pueden usar y que sean las más adecuadas. Puedes tener pequeñas estrategias que puedes aplicar desde casa como:

  • Realiza microtareas: si no sientes ánimos de levantarte de la cama puedes cambiarte el pijama, hacer la cama. Es una tarea pequeña, cada paso cuenta.
  • Camina durante 10 minutos: se entiende que no te sientas motivado para salir a andar, pero la motivación llegara despues y lo agradecerás a ti mismo.
  • Habla o busca ayuda cuando lo requieras.

La terapia te puede beneficiar en múltiples áreas de tu vida. en terapia puedes conseguir estrategias o técnicas tales como.

Como se ha mencionado anteriormente, la depresión puede tener bases biológicas y en ocasiones la medicación suele ser una estrategia que se usa en su tratamiento, siempre de la mano de especialistas.

Conclusiones

Los síntomas de depresión grave pueden afectar tu vida, pero eso no implica que nunca puedas salir de ello. Es importante tener en cuenta los objetivos con los que quieras trabajar, mejorar los síntomas, recuperar el nivel de funcionamiento psicosocial o prevenir futuros episodios depresivos.

Los síntomas de depresión mayor se pueden mejorar con el tiempo, paciencia y compromiso propio. En principio querrás cambios rápidos, dejar de sentirte triste y sentirás ansiedad cuando en primera instancia no se logran, pero los objetivos sí se alcanzan.

Puedes volver a relacionarte, cuidar de ti misma y volver a esas actividades que tanto te gustan.

Referencias

Organización Mundial de la Salud: OMS. (2023, March 31). Depresión. Who.int; World Health Organization: WHO.