Poner Límites a tu Pareja: Un Acto de Amor Propio y Respeto Mutuo

Poner límites a tu pareja

En la dinámica de una relación de pareja, la cercanía emocional y la intimidad son metas anheladas. Sin embargo, a menudo se confunde esta cercanía con la disolución de la individualidad, lo que lleva a dinámicas poco saludables. La psicología moderna nos enseña que una relación sólida no se construye sobre la fusión, sino sobre la sana separación de dos individuos completos que eligen compartir su vida. En este contexto, poner límites a tu pareja es un acto fundamental de autocuidado y respeto que sienta las bases para una relación duradera y equitativa. Este artículo explora qué son los límites, por qué nos cuesta establecerlos, las implicaciones psicológicas de su ausencia y cómo podemos comenzar a construirlos.

Poner límites a tu pareja
Poner límites a tu pareja

¿Qué son los Límites dentro de la Relación de Pareja?

Cuando hablamos de límites nos referimos a las reglas y expectativas que se establecen para proteger tu bienestar físico, emocional y mental dentro de una relación. Son una forma de comunicar a tu pareja lo que es aceptable para ti y lo que no lo es. Estos límites pueden ser explícitos, como acordar cuánto tiempo pasarán juntos o cómo manejarán sus finanzas, o implícitos, como la necesidad de tener tiempo a solas o de que se respeten tus decisiones personales. Poner límites a tu pareja es un acto de autocuidado que fortalece la individualidad de cada uno.

¿Por qué Cuesta Poner Límites a tu Pareja?

Es común que muchas personas eviten establecer límites por diversas razones psicológicas:

  • Miedo al rechazo o al abandono: Se teme que, al expresar una necesidad o un desacuerdo, la pareja se sienta herida y decida terminar la relación.
  • Creencia de que el amor lo “puede todo”: Algunas personas creen que en una relación de amor no hay espacio para los límites y que todo debe ser compartido de forma incondicional, incluso a costa de su propia felicidad.
  • Baja autoestima: Una persona con baja autoestima podría sentir que sus necesidades no son lo suficientemente importantes como para ser expresadas y que no merece que su pareja se adapte a ellas.
  • Confusión entre amor y fusión: Se cree que la intimidad es sinónimo de no tener una identidad propia y de que ambos deben ser uno solo, borrando las fronteras individuales.

Implicaciones Psicológicas de la Falta de Límites

La dificultad para poner límites a tu pareja de forma clara puede tener consecuencias psicológicas significativas y perjudiciales:

  • Resentimiento: Con el tiempo, la persona que constantemente cede a los deseos de su pareja sin establecer sus propios límites, comienza a sentir resentimiento, lo cual envenena la relación y la comunicación.
  • Pérdida de identidad: Sin límites, es fácil perder el sentido de uno mismo. Empiezas a adoptar los gustos y opiniones de tu pareja y dejas de lado los tuyos, perdiendo tu individualidad.
  • Aumento de la ansiedad: Estar en una relación donde no sabes qué esperar o donde constantemente sientes que tus necesidades no son respetadas puede generar altos niveles de ansiedad y estrés.
  • Dinámicas de poder poco saludables: La falta de límites puede llevar a un desequilibrio en el poder de la relación, donde una de las partes toma todas las decisiones y la otra simplemente las acepta.

Poner límites a tu pareja

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Ventajas y Desventajas de Poner Límites a tu Pareja

Ventajas

  • Mayor respeto: Poner límites a tu pareja crea un respeto mutuo, ya que ambos entienden y valoran las necesidades del otro.
  • Relación más sana y estable: Una relación con límites claros reduce los conflictos y mejora la comunicación, lo que la hace más duradera y feliz.
  • Crecimiento personal: Establecer límites te permite conocerte mejor, entender tus necesidades y trabajar en tu autoestima.
  • Sensación de seguridad: Saber que tus límites serán respetados te hace sentir seguro y valorado en la relación.

Desventajas

  • Tensión inicial: Al principio, poner límites a tu pareja puede generar conflictos o incomodidad, especialmente si no están acostumbrados a esta dinámica.
  • Resistencia de la pareja: Es posible que tu pareja se resista a los nuevos límites, lo cual requiere una comunicación firme y constante de tu parte.
  • Riesgo de ruptura: En algunos casos, si la pareja no está dispuesta a respetar tus límites, la relación puede terminar. Sin embargo, esto a menudo es una señal de que la relación no era saludable.

Guía para Comenzar a Establecer Límites

  • Identifica tus necesidades: Tómate un tiempo para reflexionar sobre lo que realmente necesitas en la relación. ¿Necesitas más tiempo a solas? ¿Te sientes incómodo con ciertos comentarios o acciones?
  • Comunícate de forma clara y amable: Elige un momento tranquilo para hablar con tu pareja. Usa frases en primera persona, como “Yo me siento…” o “Yo necesito…”, en lugar de frases acusatorias como “Tú siempre…”.
  • Sé consistente: Una vez que hayas establecido un límite, sé firme en mantenerlo. Si cedes una vez, tu pareja podría pensar que los límites no son serios.
  • Establece consecuencias: Si tu pareja cruza un límite, es importante que haya una consecuencia clara. Por ejemplo, si un límite es no gritar, puedes decir: “Si sigues gritando, voy a necesitar alejarme un momento de la conversación para calmarme.”

Poner límites a tu pareja

Conclusión

Poner límites a tu pareja no es un acto de egoísmo, sino un acto de amor propio que beneficia a ambos en la relación. Aunque al principio pueda ser incómodo, es la base para construir una relación sana, respetuosa y duradera. No se trata de controlar al otro, sino de cuidar de ti mismo. Cuando te cuidas, también cuidas de la relación. Si te resulta difícil establecer límites, considera la posibilidad de buscar apoyo profesional con un terapeuta, recuerda que Mente Sana contamos con un equipo de profesionales capacitados para guiarte. Agenda tu sesión gratuita aquí.

Referencias

Noelia P. (2023). Cómo poner límites saludables en una relación y respetarlos. Noeliaperezpsicologa.com

Francisco H. (2025). Cómo establecer límites en la pareja. Avanzapsicologos.com

Falta de deseo sexual: Causas y abordaje

Falta de deseo sexual
Falta de deseo sexual

La falta de deseo sexual, también conocida como deseo sexual hipoactivo, es una problemática que afecta tanto a hombres como mujeres, y puede tener un impacto significativo en la vida individual y de pareja.

Se estima que entre el 10% y 15% de los adultos pueden experimentar esto en algún momento de su vida, y aunque suele ser más reportado por mujeres, también es frecuente en hombres, especialmente en contextos de estrés, enfermedad o conflictos relacionales.

¿Qué es la falta de deseo sexual?

La falta de deseo sexual o la disminución de la libido se caracteriza por una disminución o ausencia persistente de pensamientos sexuales, fantasías eróticas o interés por la actividad sexual. Esto varía en gran medida entre individuos y puede disminuir temporalmente por trastornos como la fatiga y la ansiedad, aunque de igual manera, tiende a reducirse gradualmente con la edad.

El deseo sexual también implica afectos, puesto que conlleva una conexión emocional y un intercambio de energías, puesto que puede generar bloqueos desde el aspecto relacional-emotivo.

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Causas y trasfondo

La falta de deseo sexual puede tener múltiples causas, tanto psicológicas como físicas y relacionales. El estrés, la depresión, la ansiedad o traumas pasados pueden afectar negativamente la libido. Esto implica que la conexión sexual no solamente implica lo físico, sino que lo afectivo cobra importancia, por el contenido emocional almacenado en la esfera somática. Cuando una persona presenta bloqueo somático, muchas veces se relaciona con situaciones incómodas relacionados al tema sexual, las cuales no están saliendo a flote.

También influyen la baja autoestima, una imagen corporal negativa o sentimientos de culpa hacia la sexualidad. En el ámbito de la pareja, los conflictos, la rutina o la falta de conexión emocional pueden disminuir el deseo, así como los factores hormonales.

Asimismo, se ha estudiado que la educación sexual recibida y las creencias culturales pueden generar bloqueos o represión del deseo, especialmente en mujeres.

Lee también: Deseo sexual: factores que influyen

Tipos de deseo sexual hipoactivo

Existen diferentes tipos en los que puede manifestarse la falta de deseo sexual, cada uno con sus propias características:

  • Deseo sexual hipoactivo primario: Suele presentarse principalmente en mujeres que nunca han experimentado un deseo sexual significativo. Se caracteriza por la ausencia de fantasías sexuales y una escasa iniciativa o interés por la actividad sexual. Comienza generalmente en la adolescencia y tiende a agravarse en la adultez.
  • Deseo sexual hipoactivo secundario: Afecta a personas que anteriormente tenían un deseo sexual normal, pero que con el tiempo lo han perdido de forma progresiva o repentina.
  • Falta de deseo sexual generalizada: el desinterés se extiende a todas las personas, incluida la pareja, sin que haya atracción o interés sexual por nadie en particular.
  • Falta de deseo sexual situacional: La persona no experimenta deseo sexual hacia su pareja actual, pero sí puede sentir atracción o deseo por otras personas.

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Diferencias de la falta de deseo sexual en hombres y mujeres

En el caso de los hombres, la falta de deseo sexual puede estar relacionada con factores hormonales como una baja de testosterona, el consumo de medicamentos (antidepresivos, antihipertensivos), problemas psicológicos como ansiedad o depresión, o dificultades en la relación de pareja (Corona et al., 2016). Asimismo, enfermedades como cáncer de próstata avanzado o la enfermedad renal crónica, también afectan a la disminución de la libido.

En las mujeres, las causas pueden ser aún más complejas e incluir fluctuaciones hormonales (como las que se presentan en el embarazo, posparto o menopausia), experiencias sexuales negativas, dolor durante el coito (dispareunia), autoimagen corporal negativa o trastornos del estado de ánimo. Estudios señalan que el 30% de las mujeres manifiestan algún grado de deseo sexual bajo a lo largo de su vida.

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La falta de deseo sexual en el matrimonio

En el contexto del matrimonio o de relaciones de largo plazo, la falta de deseo sexual puede tener un componente relacional importante. La rutina, los resentimientos no resueltos, la falta de comunicación afectiva y sexual, así como las exigencias del día a día, pueden erosionar el vínculo erótico. Según Schnarch (1997), la intimidad sexual duradera no se basa solo en la atracción física, sino en la conexión emocional, la autenticidad y el crecimiento individual, lo cual se basa principalmente en una favorable conexión comunicativa, de cercanía, juego empatía.

Cuando uno o ambos miembros de la pareja experimentan deseo sexual bajo, esto puede generar sentimientos de rechazo, inseguridad o resentimiento, que a su vez profundizan la distancia emocional. Sin embargo, no siempre la falta de deseo implica falta de amor; muchas veces es una señal de que algo en la dinámica necesita ser revisado y atendido.

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Tratamiento y abordaje

El abordaje de la falta de deseo sexual requiere una evaluación multidimensional. Desde el enfoque psicológico, la terapia sexual individual o de pareja puede ser de gran utilidad. Esta intervención permite explorar creencias disfuncionales sobre la sexualidad, trabajar el erotismo, abordar experiencias que generan bloqueo, mejorar la comunicación y reconstruir la intimidad.

La terapia cognitivo-conductual (TCC) ha mostrado eficacia al ayudar a identificar y modificar pensamientos negativos o evitativos relacionados con el sexo. Asimismo, la Terapia EMDR, aborda la inseguridad construida desde experiencias traumáticas sobre el tema sexual. Por otro lado, terapias centradas en el mindfulness y la atención plena han demostrado beneficios en mujeres con deseo sexual bajo, al ayudarles a reconectar con las sensaciones corporales y la experiencia del placer.

En casos donde se identifican causas hormonales, puede considerarse el tratamiento médico con estrógenos, andrógenos o moduladores hormonales, siempre bajo supervisión especializada.

Conclusiones

La falta de deseo sexual es una experiencia compleja que no debe entenderse como una simple disfunción, sino como una manifestación de múltiples factores interconectados: biológicos, psicológicos, relacionales y sociales.

Comprender su trasfondo, permite abordarlo con mayor empatía y eficacia, pues la libido no desaparece sin razón: suele ser una señal de que algo en la historia personal o en la relación necesita ser escuchado, comprendido y transformado.

Por ello, el tratamiento requiere una mirada integradora que combine intervención médica si es necesario, con un acompañamiento terapéutico que facilite la reconexión con el cuerpo, la intimidad y el derecho al placer. Recuperar el deseo no siempre significa volver al punto de inicio, sino avanzar hacia una sexualidad más consciente, libre y auténtica.

Referencias

Guillén, A. (2024). Falta de deseo sexual: qué es, síntomas y tratamiento. Top Doctors Diccionario Médico.

Jimbo, M. (2024). Reducción de la libido en los hombres. En MSD Manuals.

Mayo Clinic. (2022, septiembre 15). Low sex drive in women: Symptoms and causes.

Schnarch, D. (1997). Passionate Marriage. W.W. Norton & Company.

La señal más clara de que le gusto: 5 señales básicas

La señal más clara de que le gusto
La señal más clara de que le gusto
La señal más clara de que le gusto

Vivimos buscando la señal más clara de que le gusto a esa persona especial, esperanzados y enamorados de mil maneras distintas. Nos enfocamos, de forma constante, en preguntarnos ¿esa persona que tanto me atrae, siente lo mismo que yo? es normal querer tener la respuesta, es normal también mirar los detalles que puedan, quizás, respondernos eso incluso antes de que la otra persona lo haga, con estas señales claras podrás tener una mejor idea de ello.

¿Cómo saber que le gusto a alguien más?

No vamos a tapar el sol con un dedo: a todos nos ha pasado. Ver a una persona, sentir la conexión, las vibras, la energía, la forma en la que todo fluye tan bien, y entonces la pregunta del millón aparece ¿estoy viendo correctamente las señales, o solo soy yo malinterpretando las cosas?

El ser humano es un misterio, empecemos por ahí: un misterio increíble de descubrir, pero frustrante cuando no entendemos las señales que las sutilezas o el lenguaje corporal dejan atrás, al final de cuenta cuando se trata de gustar todo es sobre la mera atracción humana y el cómo está basada en patrones de conducta y emocionales que, con un ojo claro, podrás entender cuál es la señal más clara de qué le gusto.

La atracción y su papel fundamental en la señal más clara de que le gusto

La atracción es, por obviedad, el pilar fundamental para responder ésta pregunta y manejar las dudas. Está definida como el efecto de agradar a alguien, física, emocional, o sexualmente hablando, se puede traducir como interés desde otro punto de vista, uno que atrae a las personas a querer estar juntas, a querer compartir, es la capacidad que tiene el ser humano de decir: quiero compartir parte de mi vida con ésta persona.

¿Cuál es la señal más clara de que le gusto? Puntos claves

Recuerda: este artículo es meramente de entretenimiento, y aunque como psicóloga tenga claros fundamentos, la atracción y el amor son cosas que no podemos medir, y por lo tanto sin imposibles de estandarizar en una simple lista de detalles o trucos a seguir. La lista a continuación presentada es de guía, pero no implica que todas las personas, interacciones o relaciones funcionen así.

  1. El lenguaje corporal habla por su propia cuenta

Existen sutilezas que el cuerpo muestra incluso sin que uno intente hacerlo, cosas que revela sin el permiso de las palabras o de la mente, y el lenguaje corporal suele ser uno de los delatores principales a la hora de hablar de señales claras de que le gustas a alguien, en detalles como:

  • Cuerpo que “te busca”, como inclinaciones que van hacia ti, invadiendo un poco ese espacio personal (Y ojo, recuerda: siempre con consentimiento)
  • Sonreír de forma prolongada al verse (fíjate en su ojos, esos no suelen mentir)
  • Mantener el contacto visual por mucho tiempo y buscarlo de forma constante;
  • Juguetear entre ustedes, con pequeños detalles como el cabello o manos y dedos.

  1. Interés que se traduce en búsqueda de ti, sin razón.

O eso aparenta, tal y como cuenta la atracción: interés por estar cerca de una persona. Y en este caso la señal más clara de que le gusto es ese gustillo por tenerte cerca, la búsqueda de excusas para verse, para hablar, para escribirte, para proponer planes. No son tan casuales como parecen, son esa necesidad de estar al lado de la persona especial.

  1. Se interesa de forma genuina

El interés es la señal más especial de atracción, una que podemos entender como parte de la señal más clara de que le gusto, y es lo genuino detrás de ese mismo interés: el cómo estás, los detalles, que tu seas su interés y foco, y no un mero entretenimiento. Es una muestra de que busca conectar contigo para conocerte, así que alégrate ¡Estamos llegando a una respuesta!

  1. Busca ser útil para ti

Y no hablamos de “utilidad” como solemos conocerla, sino más bien a ese acto de querer ayudar hasta en lo más mínimo para buscar y tener tu atención. Se suele decir que nadie hace las cosas sin un objetivo o sin un interés, y aunque éstos actos sean en estos casos unos hechos desde el corazón, el objetivo es la cercanía: exactamente, la señal más clara de que le gusto puede estar aquí.

  1. Tensión positiva

Asociamos tensión a lo negativo, pero olvidamos lo delicioso y jugoso que es disfrutar de una tensión emocional tirante con una persona que te atrae ¡y que además sea recíproco! esta señal clara se puede ver en pequeños gestos, como silencios no incómodos, sentirse a gusto al estar juntos, mirarse más de lo habitual y sentir que son llamados por el otro, las sonrisas tontas… quizás, un combinado de todas las anteriores.

¡Pero aún así puedo estar malinterpretando! ¡Necesito más claridad sobre la señal más clara de que le gusto!

De nuevo, esta no es una guía perfecta ya que cada persona es distinta, sin embargo confía en tu instinto, es fácil decir palabras bonitas pero el cuerpo es mucho más complicado de engañar. Lo importante es tener en consideración que querer es dar un salto de fe, ya que la única forma en la que podrás estar al 100% seguro, y con la respuesta a ¿cuál es la señal más clara de que le gusto? es preguntarle.

  • Confesarte.
  • Hablarlo.
  • Comunicarte.

Y sí, eso es lo complicado ¿por qué estaría leyendo un artículo para reconocer las señales si es tan fácil ir y preguntarle? bueno, aquí te va el consejo final: ningún artículo va a decirte lo que la otra persona siente, así que ¿Qué es lo peor que podría pasar?

Conclusiones

El amor jamás ha sido sencillo, desde la mitología, el inicio de los tiempos y por toda nuestra historia de la humanidad. Amar es sencillo, practicarlo al parecer se nos es demasiado complicado debido a las mil y un formas de sobrepensar que nos suelen rondar por la cabeza. Aún así, con la duda carcomiendo sobre ¿Cuál es la señal más clara de que le gusto? y sin respuesta, solo debes observar, sin obsesionarte por favor, pero solo observa.

Si la atracción es mutua, lo notarás. Pero jamás lo sabrás si nunca te acercas.

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Referencias bibliográficas

GÓMEZ JACINTO, L. (s. f.). Atracción y amor. Ediciones Pirámide, 217-244.

¿Banderas verdes y rojas? ¡Navega con éxito en tus relaciones!

Banderas verdes y rojas

Las relaciones de pareja son un pilar fundamental en la vida de muchas personas. De hecho, se estima que alrededor del 70% de los adultos en algún momento de su vida establecen una relación de pareja duradera (Pew Research Center, 2020). Sin embargo, no todas las relaciones son idílicas. Identificar las banderas verdes y rojas es crucial para construir vínculos saludables.

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Entendiendo las Banderas Verdes y Rojas

En el complejo mundo de las interacciones humanas, especialmente en las relaciones románticas, es vital reconocer las señales que nos indican si un vínculo es constructivo o potencialmente dañino. Estas señales se conocen popularmente como banderas verdes y rojas.

Las banderas rojas en una relación son indicadores de comportamientos o patrones que pueden llevar a la insatisfacción, el conflicto o incluso el abuso.

Por otro lado, las banderas verdes en una relación son señales de una conexión sana, respetuosa y enriquecedora (Gottman & Silver, 2015). Comprender la diferencia entre banderas verdes y rojas es el primer paso para fomentar relaciones duraderas y significativas.

Banderas rojas en una relación: Señales de alerta que no debes ignorar

Las banderas rojas en una relación son advertencias importantes. Ignorarlas puede tener consecuencias negativas para tu bienestar emocional y psicológico. Es fundamental aprender a identificarlas para protegerte. A continuación hablaremos de algunas de las principales banderas rojas que se identifican en una relación.

1. Comunicación tóxica

Uno de los principales indicadores de banderas rojas en una relación es la comunicación tóxica. Esto incluye el desprecio, la crítica destructiva, la actitud defensiva y la obstrucción (Gottman & Levenson, 1992). El desprecio, por ejemplo, se manifiesta a través de sarcasmo, burla o un lenguaje corporal que denota superioridad, lo que erosiona la autoestima de la pareja.

2. Control excesivo y los celos

El control excesivo y los celos son claras banderas rojas en una relación. Esto puede manifestarse como querer saber dónde estás en todo momento o limitar tus interacciones sociales. Este comportamiento, a menudo impulsado por la inseguridad, refleja una falta de confianza y respeto por la autonomía del otro (Johnson, 2008). Una relación saludable se basa en la libertad individual.

3. Falta de respeto

La falta de respeto se presenta de diversas formas y es una de las banderas rojas en una relación más evidentes. Puede ser desde interrupciones constantes hasta la desvalorización de tus opiniones. Cuando una persona no valora tus pensamientos o sentimientos, la relación se vuelve desequilibrada (Bowlby, 1969). El respeto mutuo es el cimiento de cualquier vínculo sano.

4. Manipulación emocional

La manipulación emocional es una forma sutil pero dañina de control y es otra de las banderas rojas en una relación. Quien manipula utiliza la culpa, la victimización o el chantaje para lograr sus objetivos. Este patrón de comportamiento puede generar confusión y culpa en la víctima, distorsionando su percepción de la realidad (Stern, 2007).

5. Violencia (física o psicológica)

Cualquier forma de violencia es una de las banderas rojas en una relación más graves e inaceptables. La violencia física es obvia, pero la psicológica, como las amenazas o la intimidación, es igual de perjudicial (Walker, 1979). Si experimentas violencia, buscar ayuda profesional es crucial.

Banderas verdes en una relación: Construyendo vínculos saludables

Así como existen las banderas rojas en una relación, también hay banderas verdes en una relación que nos indican un camino hacia un vínculo sano y feliz. Reconocerlas te ayudará a fomentar relaciones que te nutran y te hagan crecer, a continuación se describirán algunas banderas verdes que hacen de tu relación una más sana.

1. Comunicación abierta y honesta

La comunicación abierta y honesta es una de las principales banderas verdes en una relación. Esto implica la capacidad de expresar tus pensamientos y sentimientos sin miedo al juicio. Una comunicación efectiva fomenta la cercanía y la resolución de conflictos (Gottman & Silver, 2015).

2. Respeto mutuo y autonomía

El respeto mutuo es una de las banderas verdes en una relación fundamentales. Reconocer y valorar la individualidad del otro, así como su espacio personal, es vital. Esto incluye apoyar sus decisiones y metas, incluso si difieren de las tuyas (Bowlby, 1969).

3. Confianza y seguridad

La confianza es la base de las banderas verdes en una relación. Sentirte seguro y apoyado en tu relación te permite ser vulnerable. La ausencia de celos infundados y la transparencia son pilares de la confianza (Johnson, 2008).

4. Apoyo incondicional

El apoyo incondicional es una de las banderas verdes en una relación más gratificantes. Significa estar ahí para tu pareja en los buenos y malos momentos. Celebrar los éxitos y ofrecer consuelo en las dificultades fortalece la relación (Gottman & Silver, 2015).

5. Empatía y comprensión

La empatía es la capacidad de ponerse en el lugar del otro y es una de las banderas verdes en una relación que fomenta la conexión emocional. Comprender las emociones y perspectivas de tu pareja genera un vínculo más profundo (Rogers, 1959).

Herramientas y soluciones: Navegando entre banderas verdes y rojas

las banderas verdes y rojas es el primer paso. El siguiente es saber cómo actuar. Aquí te brindamos algunas herramientas y soluciones prácticas para navegar en tus relaciones, reconociendo las banderas verdes y rojas.

1. Comunicación asertiva

Una herramienta esencial para abordar las banderas rojas en una relación es la comunicación asertiva. Esto implica expresar tus necesidades y límites de manera clara y respetuosa. Por ejemplo, en lugar de acusar, puedes decir: “Me siento incómodo cuando…”, lo que fomenta el diálogo constructivo (Salter, 1949). La asertividad te permite defenderte sin agredir.

2. Establecimiento de límites saludables

Establecer límites es fundamental para manejar las banderas rojas en una relación y proteger tu bienestar. Esto significa definir qué comportamientos son aceptables y cuáles no. Por ejemplo, si tu pareja interrumpe constantemente, puedes decir: “Necesito que me escuches sin interrumpir” (Cloud & Townsend, 1992). Los límites son una forma de autocuidado.

3. Fomentar la inteligencia emocional

La inteligencia emocional es clave para reconocer y gestionar las banderas verdes y rojas. Esto implica la capacidad de identificar y comprender tus propias emociones y las de tu pareja (Goleman, 1995). Desarrollar esta habilidad te permite responder de manera más efectiva a las situaciones difíciles y fortalecer las banderas verdes en una relación.

4. Terapia de pareja y asesoramiento

Cuando las banderas rojas en una relación son persistentes o severas, la terapia de pareja puede ser una herramienta invaluable. Un terapeuta puede ayudar a identificar patrones disfuncionales y a desarrollar estrategias de comunicación saludables (Johnson, 2008). La terapia ofrece un espacio seguro para abordar los desafíos.

5. Autoconocimiento y crecimiento personal

El autoconocimiento es fundamental para identificar tanto las banderas rojas en una relación como las banderas verdes en una relación. Entender tus propios patrones de apego y tus necesidades emocionales te permite tomar decisiones más informadas (Bowlby, 1969). Un mayor autoconocimiento te empodera para elegir relaciones que te beneficien.

En resumen, las banderas verdes y rojas son cruciales para entender la dinámica de tus relaciones. Presta atención a las banderas rojas en una relación para protegerte y busca activamente las banderas verdes en una relación para construir vínculos significativos y duraderos. Recuerda que mereces una relación sana y plena.

Conclusión

En conclusión, entender y reconocer las banderas verdes y rojas es fundamental para cualquier relación significativa. Al estar atentos a las banderas rojas en una relación, nos protegemos de patrones dañinos y toxicidad, mientras que al nutrir las banderas verdes en una relación, construimos vínculos basados en el respeto, la confianza y la comunicación saludable.

Recordar que las relaciones son un camino de aprendizaje y crecimiento continuo nos permite aplicar herramientas como la comunicación asertiva y el establecimiento de límites. Al final del día, invertir en nuestro autoconocimiento y buscar apoyo profesional cuando sea necesario nos empodera para crear y mantener relaciones que no solo sobreviven, sino que prosperan.

Referencias

Bowlby, J. (1969). Attachment and Loss, Vol. 1: Attachment. Attachment and Loss. New York: Basic Books.

Cloud, H., & Townsend, J. (1992). Boundaries: When to Say Yes, When to Say No, To Take Control of Your Life. Zondervan.

Goleman, D. (1995). Emotional Intelligence: Why It Can Matter More Than IQ. Bantam Books.

Gottman, J. M., & Levenson, R. W. (1992). Marital processes predictive of later dissolution: Behavior, physiology, and health. Journal of Personality and Social Psychology, 63(2), 221–233.

Gottman, J. M., & Silver, N. (2015). The Seven Principles for Making Marriage Work: A Practical Guide from the Country’s Foremost Relationship Expert. Harmony.

Johnson, S. M. (2008). The practice of emotionally focused couple therapy: Creating connection. Brunner-Routledge.

Pew Research Center. (2020). Marriage and Family Life in the U.S.

Rogers, C. R. (1959). A theory of therapy, personality, and interpersonal relationships as developed in the client-centered framework. In S. Koch (Ed.), Psychology: A study of a science. Vol. 3: Formulations of the person and the social context (pp. 184–250). McGraw-Hill.

Salter, A. (1949). Conditioned reflex therapy. Creative Age Press.

Stern, D. N. (2007). The interpersonal world of the infant: A view from psychoanalysis and developmental psychology. Basic Books.

Walker, L. E. (1979). The Battered Woman. Harper & Row.

“Mi pareja me dice que estoy mal de la cabeza”: Violencia psicológica

Mi pareja me dice que estoy mal de la cabeza
Mi pareja me dice que estoy mal de la cabeza

Escuchar frases como “mi pareja me dice que estoy mal de la cabeza”, “estás loca”, “todo lo haces mal”, etc., pueden parecer discusiones comunes dentro de una relación conflictiva. Sin embargo, cuando se repiten de forma sistemática, son señales claras de violencia psicológica. Este tipo de maltrato, muchas veces invisible, tiene consecuencias graves para la salud mental de quien lo sufre, y suele estar relacionado con dinámicas de control y manipulación emocional.

¿Qué es la violencia psicológica?

La violencia psicológica en la pareja incluye conductas que desvalorizan, humillan, aíslan o generan miedo en la otra persona. A diferencia de la violencia física, este tipo de abuso no deja marcas visibles, pero su efecto puede ser igual o más devastador.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS, 2021), este tipo de maltrato es una de las formas más comunes de violencia de género y puede generar síntomas de ansiedad, depresión, trastornos del sueño y disminución de la autoestima.

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Gaslighting: hacer dudar de la realidad

Frases como “mi pareja me dice que estoy mal de la cabeza”, “me dice que estoy loca”, “me dice que exagero y soy dramática” … muestran clara señal de manipulación psicológica, conocida como gaslighting, en la que la persona hace que su pareja dude de su percepción, memoria o juicio.

El gaslighting es una forma de abuso emocional, donde las víctimas pueden desarrollar síntomas similares a los del trastorno de estrés postraumático (TEPT), ya que viven en un estado constante de duda, culpa y confusión.

Efectos psicológicos del maltrato verbal

El maltrato verbal es una forma de violencia psicológica que incluye insultos, gritos, humillaciones, amenazas, sarcasmo hiriente o críticas constantes. Frases como “todo lo haces mal” o “eres una mala persona” tienen un impacto directo en el autoconcepto y autoestima.

 Los efectos del maltrato verbal son reales y pueden ser duraderos en la psique, generando desvalorización personal, miedo constante, ansiedad, estrés crónico, depresión, aislamiento social e incluso síntomas disociativos.

Además, la violencia verbal reiterada puede generar “indefensión aprendida”, una condición en la que la persona cree que no puede cambiar su situación, aunque tenga la posibilidad de hacerlo, por haber vivido múltiples experiencias en las que intentó defenderse sin éxito.

Descubre más en: ¿Qué es el maltrato psicológico y cómo afrontarlo?

¿Por qué no es fácil salir de esta situación?

Muchas víctimas de violencia emocional no se dan cuenta de que están siendo maltratadas. Esto se debe a que la manipulación suele ser sutil y progresiva, lo que altera la percepción y genera duda y confusión sobre las emociones y recuerdos, que a su vez conlleva culpa y vergüenza.

En muchos casos existe una normalización del abuso cuando el maltrato es constante o si la víctima ha crecido en entornos violentos, por lo que puede no reconocerlo como algo dañino.

Asimismo, después de episodios de agresión, es común que el maltratador muestre arrepentimiento, afecto o promesas de cambio, lo que da cabida al ciclo de refuerzo intermitente. Referente a una alternancia entre maltrato y aparente cariño que genera un vínculo traumático o dependiente

Además, en contextos donde existe dependencia emocional, económica o hijos en común, la posibilidad de dejar la relación se vuelve aún más compleja. El vínculo traumático con el agresor puede dificultar la toma de decisiones, ya que se activa un mecanismo de apego disfuncional que mezcla afecto con miedo y sumisión.

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¿Qué hago si mi pareja me dice que estoy mal de la cabeza?

Aunque en ocasiones estos comentarios pueden verse inofensivos, el impacto negativo es real, por lo que se debe tomar en cuenta lo siguiente.

  • Reconoce la violencia: El primer paso es nombrarla. Las palabras que te hacen sentir mal contigo misma no son parte de una relación sana.
  • Busca apoyo profesional: Un psicólogo o terapeuta especializado puede ayudarte a identificar los patrones dañinos, reconstruir tu autoestima y tomar decisiones seguras.
  • Fortalecer la red de apoyo: Aislarse es una de las consecuencias más frecuentes del abuso emocional. Romper el silencio es fundamental.
  • Establecer límites saludables: Aprender a decir “no”, ser leal con uno mismo cuando algo “se siente” que no está bien y exigir respeto.
  • Informarse: Leer sobre dinámicas tóxicas de pareja, gaslighting y trauma complejo puede ser útil para comprender mejor lo que se está viviendo.
  • Trabajar en la autonomía: La dependencia, especialmente la económica, puede dificultar la salida. Fortalecer la autonomía incluye trabajar la independencia emocional y planificar un proyecto de vida propio.

Salir de una situación de maltrato verbal no es un acto de voluntad aislado, sino un proceso que requiere paciencia, donde puede haber recaídas, dudas o intentos de reconciliación.

Puede interesarte: Manipulación emocional: Estrategias para detectarla, protegerte y superarla

Conclusiones

Los comentarios abusivos que generan duda, confusión y culpa, forman parte del maltrato psicológico que tiene efectos negativos en la salud. Frases como “mi pareja me dice que estoy mal de la cabeza”, “me dice que estoy loca”, “haces todo mal”, son clara muestra de violencia verbal y psicológica que buscan desvalorizar, humillar y controlar emocionalmente a la otra persona.

Para salir del ciclo violento, no se trata de juzgarse, sino de mantener el rumbo hacia el autocuidado. Salir del maltrato verbal es posible con apoyo, información y acompañamiento emocional. Esto permite reconstruir la vida con relaciones más sanas, seguras y empáticas.

No estás solo. En Mente Sana te ayudamos con tu proceso.

Referencias

Bellomare, Martina, Giuseppe Genova, Vincenzo y Miano, Paola. (2024). Exposición al gaslighting durante la adultez emergente: Rasgos de personalidad y caminos de vulnerabilidad. Revista Internacional de Investigación Psicológica , 17 (1), 29-39.

Herrera Rodas, Claudia Lorena, Peraza Segura, Carmen y Porter Aguilar, Hugo. (2004). El abuso verbal dentro de la violencia doméstica. Medicina Legal de Costa Rica , 21 (1), 45-90.

OMS. (2021). Violencia contra la mujer: estimaciones mundiales y regionales de la prevalencia. Organización Mundial de la Salud

¿Persona sumisa? La raíz emocional de la sumisión

Sumisa
Sumisa

Una actitud sumisa implica adoptar una postura de obediencia, pasividad o subordinación frente a otra persona, pareja o grupo. Este comportamiento puede manifestarse de forma voluntaria o condicionada, donde influyen la personalidad, el contexto social y las experiencias tempranas.

A continuación, exploraremos el concepto de sumisión y su impacto en las relaciones sociales.

¿Cómo es una persona sumisa?

Según la American Psychological Association (APA), la sumisión, se refiere al acto de rendirse o aceptar la autoridad o el control de otra persona o grupo.

Desde la psicología de la personalidad, Theodore Millon, refiere a una persona sumisa como alguien que tiende a evitar el conflicto, busca complacer a los demás y tiene una necesidad intensa de aprobación externa.

Los individuos con este perfil suelen presentar una baja autoestima y pueden priorizar las necesidades ajenas por encima de las propias. Esto a su vez, refuerza una autoimagen negativa, que surge por lo general de la inseguridad o miedo al rechazo.

Características de una persona sumisa

  • La evitación del conflicto: Una persona sumisa tiende a evitar las confrontaciones, prefiriendo ceder, callar o aceptar lo que los demás dicen o hacen, aunque no estén de acuerdo o se sientan incómodos.
  • Vínculos de dependencia: Suele establecer relaciones de dependencia, especialmente con aquellos que tienen un rol de autoridad, dominio o protección. En algunos casos, existe una especie de “fusión” en la cual, renuncian a su identidad, sus diferencias, o su individualidad.
  • Búsqueda de aprobación: Las personas sumisas tienen una gran necesidad de agradar, de complacer y de ser aceptadas por los demás. Se sacrifican, se esfuerzan y se desviven por los demás, esperando recibir a cambio su reconocimiento, su aprobación o su cariño.
  • Un pasado doloroso: Muchas veces, la sumisión tiene su origen en un pasado de maltrato, abuso, rechazo o humillación. Esto a su vez conlleva sentimientos de culpa, vergüenza o inferioridad.
  • Perfil discreto: Una persona sumisa suele tener un perfil discreto, sin llamar la atención, destacar o sobresalir. Por ello, mantiene una actitud de humildad, cordialidad, pasividad y conformismo.
  • Tendencia a la timidez: Debido al miedo al rechazo, a la crítica o al juicio, es común que la persona sumisa se inhiba, se cohíba o retraiga en las situaciones sociales.

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Sumisión y apego

Estudios confirman que la sumisión muchas veces se origina en los estilos de apego inseguros desarrollados durante la infancia. Bowlby señalaba que los niños que crecían con cuidadores impredecibles o emocionalmente distantes tendían a desarrollar mecanismos de supervivencia relacional, como la complacencia o la inhibición emocional. En la vida adulta, esto puede traducirse en una fuerte necesidad de agradar, evitar el conflicto y buscar aprobación constante, lo que se relaciona directamente con conductas sumisas.

Muchas personas desarrollan roles sumisos como forma de protección frente a contextos hostiles, en los cuales la expresión era censurada o ignorada. En estos casos, la sumisión no es una elección consciente, sino una estrategia aprendida para sobrevivir emocionalmente.

Asimismo, quienes han desarrollado un estilo de apego inseguro-ambivalente pueden mostrar una mayor tendencia a la sumisión por miedo a ser abandonados, buscando constantemente aprobación y afecto, incluso a costa de su autonomía.

Descubre más en: El apego emocional: la teoría que define nuestras relaciones.

Ser una persona sumisa en una relación

En relaciones saludables, ceder ocasionalmente o adaptarse a la pareja no necesariamente implica sumisión patológica. Sin embargo, cuando la sumisión es constante, unilateral y asociada a miedo, control o baja autoestima, puede ser señal de una relación disfuncional o abusiva.

Estudios muestran que las personas que ejercen sumisión crónica en sus vínculos afectivos tienen mayor riesgo de desarrollar síntomas depresivos, trastornos de ansiedad y sensación de vacío existencial. Además, la falta de autonomía y expresión personal puede afectar la autenticidad emocional, lo cual debilita la calidad del vínculo relacional.

Una personalidad sumisa también puede estar relacionada con la baja autoestima, sentimiento de insuficiencia, el miedo al rechazo y la necesidad de validación externa, lo que, a su vez, conduce a actitudes de dependencia emocional.

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Superar la sumisión

Desde un enfoque clínico, el trabajo con una persona sumisa abarca el reconocimiento de sus derechos personales, la identificación de creencias disfuncionales, el fortalecimiento de la asertividad y principalmente de la autoestima.

La psicoeducación es clave para que una persona logre establecer límites, expresar necesidades, fomentar su autonomía y repara los vínculos disfuncionales, promoviendo relaciones sanas.

Conclusiones

La sumisión es una conducta compleja que puede ser adaptativa o disfuncional según el contexto y el equilibrio en la relación.

Comprender sus causas, ya sean personales, familiares o culturales, permite comprender el origen de la necesidad de ser aceptado o evitar el conflicto.

A través de la terapia psicológica, el desarrollo de habilidades, establecimiento de límites y el fortalecimiento de la identidad, es posible recuperar el equilibrio en las relaciones para construir vínculos más sanos. Superar la sumisión es un proceso gradual que requiere perseverancia, compromiso y principalmente comprensión autocompasiva.

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Referencias

Ernst Montenegro, Ricardo. (2009). Subjetividad, libertad y sumisión. Algunas notas de psicología social. Andamios6(11), 363-367.

Steffanell, Alejandro. (2020). Polo-Alvarado, Lorna. Vida de mujeres: entre la sumisión y la subversión. San Juan: Editorial Luscinia CE, 2018. Historia Caribe , 15 (37), 255-262.

Türkmen, K. & Yildiz, M. (2019). Un estudio Multidimensional Escala de Sumisión. Dini Araştırmalar, 22(56): 285-306.

Comunicación en pareja: la llave para una relación sana

comunicación en la pareja
comunicación en la pareja
comunicación en la pareja

La comunicación en la pareja no es un arte estático, sino un jardín que requiere cuidado constante para florecer. A medida que la relación evoluciona, también lo hace la necesidad de adaptar y refinar las formas en que conectamos y compartimos nuestro mundo interior. Este artículo invita a explorar la comunicación de pareja como un viaje de crecimiento continuo, donde la escucha activa, la expresión honesta y la empatía se convierten en las herramientas esenciales para construir una intimidad profunda y duradera.

 ¿Qué es la comunicación?

  • La comunicación es esencial en todas las etapas de una relación de pareja.
  • Una buena comunicación es un pilar fundamental de una relación saludable, junto con la honestidad, la confianza y el respeto.
  • La comunicación en la pareja evoluciona con el tiempo, puede haber etapas de falta de comunicación en la pareja por diversas razones.
  • Es crucial evitar los malentendidos basados en la falta de comunicación en la pareja, o suposiciones sobre los pensamientos del otro.
  • Fomentar un vínculo de confianza para la libre expresión, que es muy enriquecedora para la relación.
  • La buena comunicación es clave para la convivencia y puede marcar una gran diferencia en la vida de pareja y familiar.
  • La mala comunicación puede ser destructiva para las relaciones.
  • Es fundamental construir un espacio de comunicación asertiva en la pareja, para así expresar sentimientos y necesidades sin herir al otro.
  • Si sientes que la comunicación en tu relación se ha vuelto difícil, considera acudir a un profesional. ¡Una conversación puede cambiarlo todo!

¿Qué es la comunicación asertiva en la pareja?

Es una forma de comunicación clara y directa, donde se expresan pensamientos, sentimientos y necesidades de manera respetuosa y honesta, sin violentar o cometerse a la voluntad de los demás. Es el equilibrio entre la comunicación pasiva (no expresarse) y la comunicación agresiva (expresarse de forma dañina)

¿Cuáles son los tipos de comunicación?

Comunicación pasiva:

  • Se caracteriza por evitar conflictos y no expresar abiertamente los propios deseos o necesidades, priorizando los de los demás.
  • Implica una falta de defensa de los propios derechos y una tendencia a ceder antes las exigencias de otros.
  • Puede generar sentimientos de frustración, resentimiento y falta de autoestima.

Comunicación agresiva

  • Se caracteriza por expresar los propios sentimientos y necesidades de una manera dominante, a menudo de forma hostil o insultante, sin considerar a los demás.
  • Implica una falta de respeto por los derechos de los demás, y puede generar malentendidos, resentimiento y conflictos.
  • Puede manifestar a través de lenguaje corporal amenazante, tono de voz alto, interrupciones y otros comportamientos que intimidan o dominan.

Comunicación asertiva

  • Se caracteriza por expresar los propios sentimientos y necesidades de manera clara, honesta y respetuosa, considerando también los derechos y las necesidades de los demás.
  • Implica una defensa formal de los propios derechos, pero sin intentar dominar o agredir a otros.
  • Promueve la comunicación abierta, la empatía y la búsqueda de soluciones que satisfagan las necesidades de todos los involucrados.

¿Cuál es la importancia de la comunicación asertiva en la pareja?

  • La comunicación asertiva en la pareja es fundamental para una relación de pareja sana y duradera, ya que valida y construye más cercanía emocional.
  • Implica expresar claramente los propios sentimientos, deseos y preocupaciones, así como escuchar activamente sin juzgar.
  • La falta de comunicación en la pareja puede generar conflictos y distanciamiento de la relación.
  • Comunicarse con respeto y honestidad, fomenta confianza y evita la agresión y la imposición.
  • La comunicación asertiva es clave para abordar y resolver conflictos de manera constructiva, sin dañar a la otra persona.
  • Adoptar un estilo comunicativo asertivo, fortalece el vínculo emocional y establece una base sólida para una relación saludable y duradera.

¿Cómo puedo construir una comunicación asertiva en la pareja?

  • Identificar y controlar los propios sentimientos es crucial para una buena comunicación, evitando suposiciones y permitiendo la expresión verbal de las emociones.
  • En una discusión, el objetivo exponer sentimientos y comprender al otro, no ganar la razón, manteniendo un tono respetuoso y escuchando activamente.
  • Durante un conflicto, la pareja debe unirse contra el problema, viéndolo como una oportunidad de aprendizaje para futuras discusiones y el crecimiento de la relación.
  • Es fundamental ser abierto y esforzarse por entender la perspectiva del otro, validando sus sentimientos y escuchando sin juzgar.
  • La empatía, el respeto y la asertividad son la base de una comunicación efectiva y de relaciones humanas saludables. (como más estrategias para saber comunicarte aquí)
  • Considera la terapia de pareja como un espacio profesional para obtener una perspectiva externa y mejorar la comunicación en la pareja y el estado de ánimo. (conoce más sobre la terapia de pareja aquí).

Las consecuencias de la falta de comunicación en la pareja

La falta de comunicación en la pareja puede traer muchas consecuencias negativas, y a la larga ir deteriorando el respeto, amor y confianza. Estas son algunas de las consecuencias más comunes:

  1. Posible infidelidad.
  2. Falta de respeto constante.
  3. Acudir a alguien externo para sentir más confianza.
  4. Insatisfacción personal.
  5. Problemas sexuales o falta de deseo sexual.
  6. Ruptura de la pareja.

¿Cómo funciona la terapia de pareja?

  • La terapia de pareja no es solo para crisis, sino también para mejorar las relaciones existentes.
  • El terapeuta actúa como un facilitador neutral para que ambos miembros expresen sus pensamientos y emociones de forma clara y respetuosa, creando un espacio seguro.
  • Uno de los objetivos principales de la terapia es mejorar la comunicación en la pareja.
  • Para mejorar la comunicación asertiva en la pareja, se enfoca en la escucha activa, enseñando a comprender los sentimientos y necesidades del otro. Si sientes que la comunicación en tu relación se ha vuelto difícil, considera acudir a un profesional. ¡Una conversación puede cambiarlo todo!
  • La terapia también enseña a expresar necesidades y deseos de manera asertiva, evitando la acumulación y explosión de problemas.
  • La terapia enseña técnicas para gestionar los conflictos de manera respetuosa y constructiva, evitando la escalada de los problemas. (conoce más sobre la terapia de pareja aquí)

Invertir en una comunicación de calidad no solo previene conflictos y sana heridas, sino que también enriquece la relación, permitiendo que el amor florezca en un terreno de entendimiento y respeto. Una comunicación vibrante y honesta no solo construye una pareja más fuerte, sino que también fomenta un espacio donde cada individuo se siente valorado, escuchado y profundamente conectado. Al priorizar el diálogo significativo, las parejas pueden transformar los desafíos en oportunidades de crecimiento conjunto, asegurando así un futuro compartido lleno de comprensión y afecto duradero. Si sientes que la comunicación en tu relación se ha vuelto difícil, considera acudir a un profesional. ¡Una conversación puede cambiarlo todo!

Referencias bibliográficas

Sanara (26/6/2023) la comunicación en pareja: claves y errores comunes.

Cuéntanos (04/02/2025) comunicación de pareja: la clave para tener una relación fuerte.

El prado, psicólogos (sin fecha) Problemas de comunicación en la pareja.

Las Relaciones tóxicas: Consecuencias

Las relaciones tóxicas
Las relaciones tóxicas
Las relaciones tóxicas

A menudo, las relaciones tóxicas se disfrazan bajo una fachada de intensidad o incluso de preocupación excesiva. Sin embargo, tras esa máscara se esconden dinámicas perjudiciales que afectan el bienestar de quienes las experimentan. En este artículo, nos proponemos exponer brevemente las señales de alerta más comunes mediante un ejemplo, indicándonos su naturaleza dañina. Además, exploraremos las graves consecuencias que estas dinámicas pueden acarrear en la vida emocional, psicológica y social de las personas involucradas, buscando así fomentar las conciencia y la acción para romper estos ciclos.

¿Qué son las relaciones tóxicas?

Se considera que una relación es tóxica cuando está generando cierto daño o malestar a una o a ambas partes. Se trata de relaciones destructivas de las que resultan difícil salir debido, a la dependencia emocional que conllevan.

Para obtener más información al respecto lee este artículo “Relaciones tóxicas”

Ejemplo de señales de alerta en una relación tóxica

Raquel y Rubén iniciaron una relación de pareja, donde todo era emoción y romanticismo. Rubén era muy atento, llenaba a Raquel de halagos y parecía adorarla. Sin embargo, con el tiempo la dinámica comenzó a cambiar sutilmente. Rubén empezó a criticar la forma en la que Raquel se vestía, diciéndole que ciertos atuendos no le favorecía que llamaban demasiado la atención de otros hombres. Luego, comenzó a controlar sus salidas, mostrándose celoso si pasaba tiempo con sus amigas y haciéndole sentir culpable si no lo incluía en todos sus planes.

Si Raquel expresaba alguna opinión diferente a la de Rubén, él se ponía a la defensiva, la acusaba de no entenderlo o incluso la ignoraba hasta que ella cedía. Poco a poco, Raquel empezó a sentirse insegura de sí misma, dudando de sus propias decisiones y aislándose de sus amigos por temor a la reacción de Rubén. Él también utilizaba la manipulación emocional. Si Raquel intentaba hablar sobre algún problema en la relación, él se hacía la víctima, amenazaba con dejarla o le recordaba todos los “sacrificios” que había hecho por ella, haciéndola sentir culpable y responsable de su malestar.

En ocasiones, Rubén mostraba arrebatos de ira por cosas pequeñas, gritándole o haciéndola sentí intimidada, para luego disculparse efusivamente y prometiendo que no volvería a ocurrir, creando un ciclo de abuso y reconciliación. Raquel, que al principio era una persona alegre y segura de sí misma, se fue volviendo cada vez más ansiosa, triste y dependiente de la aprobación de Rubén. Sentía que caminaba sobre cáscaras de huevo constantemente, tratando de no “provocar” su enojo.

Las señales de alerta en esta relación tóxicas presentes en el ejemplo:

  • Control: Rubén intenta controlar la vestimenta y las salidas de Raquel.
  • Crítica constante: desaprueba la forma de vestir, y probablemente, otras cosas sobre Raquel.
  • Celos excesivos: se molesta por el tiempo que Raquel pasa con sus amigas.
  • Aislamiento: Raquel se aleja de sus amigos por temor a la reacción de Rubén.
  • Conducta defensiva: reacciona negativamente a las opiniones de Raquel.
  • Ignorar/Ley del hielo: utiliza el silencio para manipular a Raquel.
  • Manipulación emocional: se hace la víctima o utiliza la culpa para controlar a Raquel.
  • Amenazas: amenaza con terminar la relación para obtener lo que quiere.
  • Arrebatos de ira: muestra comportamientos explosivos e intimidantes.
  • Ciclos de abuso y reconciliación: alterna comportamientos abusivos con disculpas y promesas.
  • Invalidación de sentimientos: no toma en serio las preocupaciones de Raquel.
  • Dependencia emocional: Raquel se vuelve dependiente de la aprobación de Rubén.
  • Sentimientos de caminar sobre cáscaras de huevo: Raquel vive con miedo a provocar la reacción negativa de Rubén.
  • Pérdida de identidad: Raquel comienza a dudar de sí misma y a perder su esencia.

Este es solo un ejemplo, y las relaciones tóxicas pueden manifestarse de muchas maneras. Sin embargo, estas señales son indicadores comunes de que una dinámica de pareja (o incluso una amistad o relación familiar) está siendo perjudicial para el bienestar de una o ambas personas involucradas.

Consecuencias de las relaciones tóxicas como la de Raquel y Rubén

Las relaciones tóxicas, como la que ejemplificamos con Raquel y Rubén, pueden tener consecuencias devastadoras tanto a nivel emocional como físico. El estrés constante y la tensión generada por estas dinámicas dejan huella profunda en el bienestar de la persona afectada.

  • Consecuencias emocionales: mucha ansiedad y posible pánico. Tristeza profunda y riesgo de depresión. Sentirte muy inseguro y con baja autoestima. Culpa y vergüenza frecuente. Soledad por aislamiento. Dependencia emocional del otro. Problemas para dormir. En casos graves, síntomas de trauma. Dificultad para confiar en el futuro. Sentirse perdido y sin identidad propia.
  • Consecuencias físicas: presión arterial alta. Sistema inmune débil (propenso a más enfermedades). Dolores de cabeza fuertes. Problemas de estómago e intestino. Tensión y dolores musculares. Cansancio constante. Cambios de peso por apetito alterado. Problemas de la piel y mayor riesgo de problemas del corazón a largo plazo.

Como puedes observar las relaciones tóxicas generan mucho estrés que vulnera y daña tanto la mente como el cuerpo.

Conclusión

Las relaciones tóxicas representan un peligro silencioso que puede minar profundamente tu bienestar emocional y físico, también te dañan la autoestima, te genera ansiedad, depresión y pueden incluso manifestarse en dolencias físicas concretas.

Reconocer estas señales es el primer paso crucial para romper el ciclo. No debemos normalizar comportamientos que nos hacen sentir inseguros. Priorizar tu salud mental y emocional implica establecer límites firmes, es por ello, en Mente Sana estamos aquí para acompañarte y ayudarte en tu proceso hacia el bienestar y creación de límites. Te ofrecemos una sesión gratuita de terapia online, totalmente confidencial y desde la comodidad de tu hogar, para brindarte la seguridad y confianza necesaria para iniciar. Agenda tu primera sesión de terapia online gratis, sólo tú puedes dar el primer paso.

Referencias

National Institutes of Health (2020), Relaciones Tóxicas.

¿Se puede superar la infidelidad? Sanar y reconstruir la confianza

Superar la infidelidad
Superar la infidelidad
Superar la infidelidad


La infidelidad es una experiencia muy dolorosa que atraviesa una pareja, en la cual se ve quebrado un acuerdo de confianza. Esto suele romper el sentido de seguridad emocional, y generar sentimientos de traición, rabia y tristeza. Superar la infidelidad resulta complejo por múltiples factores individuales y relacionales, sin embargo, sobrellevarla sí es posible, dependiendo de los objetivos tanto del individuo, como de la pareja.

Primero, ¿Qué es la infidelidad?

La infidelidad ha sido concebida como una trasgresión al vínculo establecido entre los miembros de una pareja.
Esta puede presentarse por problemas dentro de la relación, que infringe el acuerdo implícitamente establecido con respecto a la exclusividad sexual y/o emocional, que ocurre fuera de la relación romántica la cual pone en peligro la intimidad emocional de la relación.

Actualmente, incluye relaciones sexuales, emocionales o incluso virtuales, y puede tener un impacto significativo en la confianza tanto de los miembros de la pareja, como del individuo en sí.
Manrique afirma que la infidelidad se presenta como una construcción desde el pensamiento, el sentimiento, la acción y la interacción que se puede presentar o no como un acontecimiento significativo en el ciclo vital de la pareja. Esto significa que la infidelidad está construida socialmente y conlleva la carga de múltiples significados.


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Superar la infidelidad y reconstruir la pareja

Cuando se habla de superar la infidelidad en una relación de pareja, implica un proceso conjunto de duelo, reconstrucción emocional y trabajo de pareja.

Según los estudios de Glass (2003), las reacciones ante la infidelidad se asemejan al estrés postraumático: pensamientos intrusivos, hipervigilancia y una constante revisión del pasado. No obstante, muchas parejas logran reconstruirse tras una traición si ambos miembros están dispuestos a comprometerse en un proceso de reparación emocional.

Aspectos importantes para superar la infidelidad

  • Actitud de la persona infiel:  Aceptar y validar el dolor, mostrar arrepentimiento sincero, comprometerse a no repetir la conducta y asumir la responsabilidad de los actos, sin justificar la traición ni culpar a la pareja. EL hecho de reconocer el daño causado es esencial para que el vínculo recupere seguridad.
  • Voluntad de perdonar: Perdonar no significa pasar por alto ni justificar, sino liberar la carga emocional.
  • Calidad de la relación antes de la infidelidad: Si la relación era sólida, con buena comunicación y respeto, existen mayores probabilidades de reconstrucción.

 
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Superar la infidelidad desde la comprensión mutua

Al experimentarse la infidelidad como un TEPT, la autoestima se ve afectada, de modo que la persona puede llegar a cuestionarse sobre su propio valor. Por esto, se sufre la pérdida de la confianza, de la imagen idealizada de la pareja y del futuro idealizado.

Al afectar directamente la confianza, para superar la infidelidad se debe tomar en cuenta que la persona traicionada atraviesa un dolor que, por lo general, suele tomarlo personal: “hice algo mal; algo me falta; soy insuficiente; etc.” Por esto, se comprende también que, el miembro infiel, pese a los problemas y complicaciones internas, vive en conflicto con la relación de pareja, no con la persona.

En muchos casos, la infidelidad aparece como síntoma de dificultades previas en la relación: falta de comunicación, distanciamiento emocional o insatisfacción sexual, que hace de carencia, generalmente a las heridas emocionales anteriores, incluso infantiles, duelos irresueltos o problemas con la vinculación afectiva.

Pasos para superar la infidelidad

  • Aceptación y duelo: Permítete sentir y procesar las emociones, como la tristeza, la ira, la decepción y la confusión. Es válido necesitar tiempo para elaborar el duelo por la ruptura de la confianza y la herida emocional. 
  • Comunicación honesta: Establece un diálogo abierto y sin juicios, donde ambos miembros expresen sus sentimientos y perspectivas. Atiende las palabras y el lenguaje no verbal de tu pareja. Evita acusaciones y respuestas defensivas.
  • Identificación de las causas: A través de la comunicación, busca entender las razones que llevaron a la infidelidad, ya sean individuales o relacionadas con la relación. 
  • Reconstrucción de la confianza: La confianza se reconstruye gradualmente, por lo que, aprender de la situación y brindar seguridad con paciencia, empatía y comprensión, es importante y puede tomar tiempo.
  • Terapia de pareja: La terapia permite trabajar los vínculos de apego, identificar heridas relacionales y crear nuevas formas de conexión, facilitando la comunicación, la comprensión y la construcción de nuevas bases para la relación. 
  • Apoyo social: Busca el apoyo de amigos, familiares o grupos de apoyo para procesar las emociones y recibir orientación. Compartir tu experiencia con otros puede ayudarte a sentirte menos solo y a encontrar nuevas perspectivas. 
  • Reevaluación de la relación: Evalúa si la relación puede ser reconstruida o si, a pesar de los esfuerzos, es mejor tomar caminos separados. Considera si los valores, expectativas y metas de la relación siguen siendo compatibles y si ambos miembros están comprometidos a trabajar en ella. 


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Conclusiones

Superar la infidelidad es un proceso que requiere compromiso individual y de pareja, el cual abarca la aceptación, la comunicación, la terapia y la reconstrucción de la confianza. 

Resulta importante reconocer que la infidelidad puede ser un reflejo de problemas subyacentes en la relación y que la superación involucra determinación y compromiso de ambos miembros para trabajar en la relación, y sobrellevarla.

En casos donde superar la infidelidad implica conflicto excesivo y carencia de compromiso, considerar una separación sana, puede resultar favorable para una mejor calidad de vida, desde el respeto, la aceptación y el amor propio.

Referencias

¿Cómo desenamorarse de alguien? Sencillos pasos que pueden ayudarte

¿Cómo desenamorarse de alguien?
¿Cómo desenamorarse de alguien?
¿Cómo desenamorarse de alguien?

¿Cómo desenamorarse de alguien? es quizás la pregunta más hecha por todas las personas en la faz de la tierra, y no necesitamos pruebas para ello. El amor, el enamoramiento y las rupturas son un habitual en nuestras vidas que existen para relacionarse, y ésta pregunta no es más que el dolor de un corazón herido que busca con desespero la calma y que deje de doler. No te preocupes, aquí vamos a buscar juntos la respuesta a esa pregunta y te enseñaremos a cómo desenamorarse de alguien.

El enamoramiento…

Enamorarse es algo totalmente normal. Es parte de las interacciones humanas, es una experiencia casi universal por la que todos pasamos y expresa una fase ideal, llena de rosa, flores e ilusiones. Es precioso enamorarse, el amor por su propia cuenta es precioso, en especial cuando es correspondido y se invierte en él, pero ¿y qué ocurre cuando ese amor no es correspondido? ¿o cuando ese amor tan bonito parece acabarse? Llega un periodo doloroso, donde esa conexión que antes parecía tan fuerte te rompe por completo, sigues enamorado de esa persona, pero no hay un futuro y a ti, solo te trae dolor.

El proceso de cómo desenamorarse de alguien no es fácil, el amor realmente no es fácil. Es una experiencia intensa, llena de desafíos, obstáculos, pruebas, pero que son superables, créeme, se puede salir de ahí. Sin embargo, hay que entender una cosa: durante el proceso del cómo desenamorarse de alguien, técnicamente estamos pasando por un duelo amoroso.

¿Qué es el duelo?

No es más que un proceso psicológico y emocional dónde una persona enfrenta la pérdida de algo. Ya sea un objeto, una idea, un concepto o una persona, por muerte o por separación… La palabra clave es pérdida, una significativa para la vida de quien lo sufre. No se trata solamente de un conjunto de emociones, es una experiencia completa de lucha y asimilación, único para cada persona.

Por ello, hablamos que, si queremos saber cómo desenamorarse de alguien, primero debemos saber que esto se trata de un duelo.

Ya sea porque la persona de la que buscas desenamorarte fue una pareja que ahora deben seguir adelantes, o porque se trata de un amor no correspondido y deseas continuar ya que no ves futuro, estás enfrentándose al hecho de que vas a perder algo, y eso es atroz para nuestra cabeza, aunque esa relación no vaya a más. Si buscas más información al respecto, éste articulo sobre las fases del duelo.

¿Por qué es tan complicado saber cómo desenamorarse de alguien?

Es más fácil de entender de lo que parece. ¿Esa escena de Crepúsculo dónde Edward le decía a Bella que era como una droga para él? No se escapa demasiado de la realidad si queremos explicar lo complicado que es soltar un viejo amor. El cerebro, al estar enamorado, libera una serie de hormonas o neurotransmisores que nos generan una sensación de euforia, felicidad y amor.

Entonces, el cerebro se acostumbra a asociar que la presencia de ese chico llamado Robert en tu vida, es igual a felicidad y amor, porque Robert te hace sentir bien, te hace feliz, estás enamorada de él y tu cerebro lo demuestra con una constante presencia de la dopamina y la oxitocina, alterando a veces nuestra percepción. Pero un día Robert no está, decide no estar más en tu vida, y ahora el nombre “Robert” también está asociado al dolor, y tu cerebro no lo entiende del todo ¿por qué algo que me genera dopamina y oxitocina, felicidad, ahora me genera dolor? ¿Zozobra?

Nos aferramos a un clavo ardiendo cuando se trata del dolor de una separación. El dolor, en estos casos, es lo único que de forma inconsciente sentimos nos mantiene aún atados a esa persona, y nos negamos a soltar solo porque perder eso, sería perderlo por completo.

Aquí es donde entra en juego el apego emocional. Romper lazos o pensar en desprenderse de unos sentimientos que antes fueron tan bonitos para ti, genera una sensación bastante parecida al dolor por el fallecimiento de alguien preciado. Por eso es tan complicado aprender a cómo desenamorarme de alguien. El desamor, al fin y al cabo, es una experiencia complicada, de la cual puedes aprender más aquí.

Pasos para aprender a cómo desenamorarse de alguien

  1. Súfrelo.

Suena extraño, pero es necesario. Necesitas sentir esa emoción, sufrir el desamor, permitir a las emociones venir y llorarlo lo más posible porque si estamos tomando la decisión de desenamorarme de alguien, significa que busco, hasta cierto punto, soltarlo, y la única forma de hacerlo es, primero: sintiéndolo.

Es normal que durante éste momento te niegues a ello. Aceptar que no va a haber nada o que todo acabó puede ser difícil, negar los sentimientos de pérdida es muy normal, aferrarse a ese clavo ardiendo también, pero ésto no es más que un mecanismo de defensa para protegerte del dolor. Es necesario reconocer la situación para emprender el camino a aprender cómo desenamorarse de alguien.

Primer paso: permítete sentir. No estás loco por estar triste, tampoco exageras, es normal sentir esperanzas y hasta volver a pensar en un futuro juntos, permítetelo. No te juzgues. Cómo desenamorarse de alguien no es rápido ni sencillo, es toda una montaña rusa.

Pero necesitamos aceptarlo.

  1. ¿Qué hago con esta ira? ¿Y con ésta tristeza?

Puede que experimentes, en algún punto, ira. Rabia. Una emoción totalmente humana, pero es importante que durante éste momento sepas que la mejor manera de lidiar con ello es hablarlo con amigos, familiares, personas de confianza, contigo mismo incluso. Escribe, exprésate, necesitas hacer catarsis emocional.

  1. Establece distancia física y emocional

“Pero aún podemos ser amigos” “¿Pero y si me necesita?” “Puedo demostrar que puedo hablar con él sin sentir nada”, y demás pensamientos que probablemente, compartas, y son totalmente normales dentro de esta situación. Pero la conducta detrás de todos y cada uno de ellos es contraproducente, necesitas espacio para sanar ¿cómo pretendo desligar mi cerebro de la emoción que escuchar un ‘Robert’ me genera, si sigo buscándolo y pululando a su alrededor?

El distanciamiento, el contacto cero, es quizás una de las cosas más complicadas. Es difícil romper lazos, pero es por y para ti, establece límites contigo mismo, no lo busques en redes, no preguntes sobre su persona, reduce el impacto que su presencia genera en tu vida.

Y una cosa importante: no te juzgues si caes una y otra vez, volviendo hacia su imagen. Es normal. Lo importante es que sepas que debes evitarlo lo más posible.

  1. No te culpes de lo que pudo ser distinto

No eres adivino. No podrías haberlo adivinado. Tampoco viajas en el tiempo, así que no podemos cambiar lo que ya pasó, así que no te tortures con ideas y negociaciones contigo mismo pensando que si algo cambiaba las cosas podían cambiar y tener otro final. No podemos controlar ni cambiar los sentimientos ni decisiones de los demás.

  1. Autocuidado

La fase de tristeza puede que te hunda, no vamos a mentir. Es una sensación de vacío y desesperanza, va a ser normal sentirse sin motivación, sin interés… y por ello es importante cultivar tu autocuidado para que no te descuides. Dedícate a ti mismo, cuida de ti, descansa, disfruta de cosas para ti, en cosas que refuercen tu autoestima, tu imagen personal, te aseguro que poco a poco todo mejorará.

  1. No compenses…

Cierra Tinder. Bumble también. Hazme caso. No tienes que compensar lo que perdiste buscando valoración y afirmación en fuentes externas que solo te traerán un alivio momentáneo. Y quizás no seas de aplicaciones, pero no necesitas la valoración de ese tercero para sentirte tú mismo… El proceso de cómo desenamorarse de alguien no se trata de superar y ya está, no es sólo olvidar a la persona, es de aceptar la realidad y encontrar una forma de seguir, sin ir detrás de compensaciones externas.

  1. El trío mágico

Tiempo. Amigo y helado. El trío perfecto para pasar por un corazón roto. Date tu tiempo, consigue buenos amigos con los que pasar el rato y hablar, y tu helado favorito como premio por hacerlo tan bien. Un corazón roto solo se cura con el tiempo, así que debes tener paciencia… en especial, contigo.

Desenamorarse no es fácil, es complicado e involucra una lucha constante entre cuerpo, mente, deseo, corazón y razón. Y aunque es doloroso, es parte del proceso, lo que nos resulta complicado casi siempre es entender que requiere tiempo, y es distinto para cada persona: puede que te tome días, semanas, o meses. Pero no hay un tiempo fijo para desenamorarse de alguien, pero créeme: todo pasa. Y con el debido acompañamiento será un trabajo más sencillo.

Por lo que sí estás pasando por un proceso de duelo, o deseas aprender a cómo desenamorarse de alguien, en Mente Sana podemos ofrecerte las herramientas. Agenda ya mismo tu primera cita gratuita, y aprende que es posible superar ese dolor que te ataca.

Referencias bibliográficas

Vargas Solano, Rosa Elena. (2003). Duelo y pérdida. Medicina Legal de Costa Rica20(2), 47-52.

Sánchez Aragón, Rozzana, & Martínez Cruz, Rebeca. (2014). Causas y caracterización de las etapas del duelo romántico. Acta de investigación psicológica4(1), 1329-1343.